Soldados de Estados Unidos cargan un cadáver en un camión militar
Los talibanes reivindicaron el ataque en un llamado telefónico a la AFP.
"Seis soldados internacionales murieron y varios resultaron heridos esta mañana cuando un coche conducido por un kamikaze estalló cerca de un convoy de la ISAF (fuerza de la OTAN en Afganistán) y de vehículos civiles en la carretera hacia Darulaman", indicó el comunicado de la OTAN.
Un portavoz de la OTAN precisó a la AFP que cinco de los seis soldados eran estadounidenses.
En el atentado también "murieron y resultaron heridos civiles afganos", añadió el portavoz de la OTAN.
Un responsable del ministerio afgano de la Defensa había indicado antes a la AFP que unas veinte personas habían muerto en el atentado.
De su lado, el portavoz del ministerio del Interior, Zemaray Bashary, indicó que 12 personas habían muerto en el atentado y que otras 47 fueron heridas.
"La mayoría de los heridos estaba en un bus. Hay mujeres y niños entre las víctimas", agregó.
Cinco vehículos de la OTAN y una docena de vehículos civiles resultaron dañados por la explosión.
Los restos calcinados de un minibús, de un bus, de vehículos todo terreno y de un Humvee estaban esparcidos en el lugar de la explosión.
El atentado se produjo poco después de las 08H00 locales (03H30 GMT) en las inmediaciones del palacio Darul-Aman, en una de las vías principales que llevan al centro de Kabul, al oeste de la capital.
En el barrio también se encuentran el parlamento, el museo nacional, un hospital administrado por occidentales y una universidad estadounidense.
Con estas seis bajas, un día después que cuatro soldados de la OTAN murieran, el número de militares extranjeros muertos en lo que va de año llega a 208, según un conteo de la AFP a partir del portal internet independiente icasualties.org.
"Reivindicamos este ataque. El ataque que era un atentado suicida con coche bomba fue perpetrado por nuestro muyahidín (combatiente de la guerra santa)", anunció por teléfono a la AFP un portavoz de la comandancia de los insurgentes, Zabihullah Mujahid.
El ataque estaba dirigido contra los "invasores de la OTAN", según este portavoz que habló por teléfono desde un lugar desconocido.
Los talibanes, cuya insurrección se intensificó en los últimos dos años, lanzan cada vez más ataques suicidas audaces en el centro mismo de Kabul, que se supone es el lugar mejor protegido del país.
La comandancia de los talibanes afganos anunció recientemente el lanzamiento de una serie de operaciones de "yihad" (guerra santa) - ataques, atentados y asesinatos - contra las fuerzas de la OTAN y, de manera más general, los extranjeros presentes en Afganistán.
Estas operaciones estarán dirigidas en especial contra "los invasores estadounidenses", las fuerzas de la OTAN , "los espías que se hacen pasar por diplomáticos extranjeros", "los lacayos de la administración Karzai", las sociedades privadas de seguridad, las sociedades extranjeras de construcción y "todos los apoyos de los invasores extranjeros", habían indicado los talibanes.
El 26 de febrero, un comando de talibanes atacó una residencia donde vivían extranjeros en el centro de la capital, matando a 16 personas, entre ellas siete indios, un francés y un italiano.
Anteriormente, el 18 de enero, ataques coordinados de kamikazes talibanes dejaron al menos cinco muertos y 71 heridos.
"Seis soldados internacionales murieron y varios resultaron heridos esta mañana cuando un coche conducido por un kamikaze estalló cerca de un convoy de la ISAF (fuerza de la OTAN en Afganistán) y de vehículos civiles en la carretera hacia Darulaman", indicó el comunicado de la OTAN.
Un portavoz de la OTAN precisó a la AFP que cinco de los seis soldados eran estadounidenses.
En el atentado también "murieron y resultaron heridos civiles afganos", añadió el portavoz de la OTAN.
Un responsable del ministerio afgano de la Defensa había indicado antes a la AFP que unas veinte personas habían muerto en el atentado.
De su lado, el portavoz del ministerio del Interior, Zemaray Bashary, indicó que 12 personas habían muerto en el atentado y que otras 47 fueron heridas.
"La mayoría de los heridos estaba en un bus. Hay mujeres y niños entre las víctimas", agregó.
Cinco vehículos de la OTAN y una docena de vehículos civiles resultaron dañados por la explosión.
Los restos calcinados de un minibús, de un bus, de vehículos todo terreno y de un Humvee estaban esparcidos en el lugar de la explosión.
El atentado se produjo poco después de las 08H00 locales (03H30 GMT) en las inmediaciones del palacio Darul-Aman, en una de las vías principales que llevan al centro de Kabul, al oeste de la capital.
En el barrio también se encuentran el parlamento, el museo nacional, un hospital administrado por occidentales y una universidad estadounidense.
Con estas seis bajas, un día después que cuatro soldados de la OTAN murieran, el número de militares extranjeros muertos en lo que va de año llega a 208, según un conteo de la AFP a partir del portal internet independiente icasualties.org.
"Reivindicamos este ataque. El ataque que era un atentado suicida con coche bomba fue perpetrado por nuestro muyahidín (combatiente de la guerra santa)", anunció por teléfono a la AFP un portavoz de la comandancia de los insurgentes, Zabihullah Mujahid.
El ataque estaba dirigido contra los "invasores de la OTAN", según este portavoz que habló por teléfono desde un lugar desconocido.
Los talibanes, cuya insurrección se intensificó en los últimos dos años, lanzan cada vez más ataques suicidas audaces en el centro mismo de Kabul, que se supone es el lugar mejor protegido del país.
La comandancia de los talibanes afganos anunció recientemente el lanzamiento de una serie de operaciones de "yihad" (guerra santa) - ataques, atentados y asesinatos - contra las fuerzas de la OTAN y, de manera más general, los extranjeros presentes en Afganistán.
Estas operaciones estarán dirigidas en especial contra "los invasores estadounidenses", las fuerzas de la OTAN , "los espías que se hacen pasar por diplomáticos extranjeros", "los lacayos de la administración Karzai", las sociedades privadas de seguridad, las sociedades extranjeras de construcción y "todos los apoyos de los invasores extranjeros", habían indicado los talibanes.
El 26 de febrero, un comando de talibanes atacó una residencia donde vivían extranjeros en el centro de la capital, matando a 16 personas, entre ellas siete indios, un francés y un italiano.
Anteriormente, el 18 de enero, ataques coordinados de kamikazes talibanes dejaron al menos cinco muertos y 71 heridos.