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La emboscada tuvo lugar en una zona de bosque del departamento de Jagdalpur, a 284 kilómetros de Raipur, la capital del estado de Chhattisgarh, en el este del país.
Los rebeldes hicieron estallar una bomba y luego dispararon con ametralladoras a los vehículos de un convoy donde iban varios responsables políticos locales que volvían de una reunión.
"El balance es ahora de 23 muertos. También podemos confirmar que hay 32 heridos, en su mayoría en estado grave", dijo a la AFP el director general de la policía del estado, Ramniwas, que sólo tiene un nombre.
El primer balance había indicado 17 muertos, entre ellos cinco policías.
En su mayoría las víctimas son dirigentes del Partido del Congreso en Chhattisgarh, incluyendo su presidente, Nand Kumar Patel, y su hijo, así como Mahendra Karm, exministro del Interior del estado.
Otro exministro local, Vidya Charan Shukla, está en estado crítico, dijo una fuente oficial.
La presidenta a nivel nacional del Partido del Congreso, Sonia Gandhi, calificó los hechos de "espantosos" y condenó los ataques contra "gente normal comprometida en política".
Los rebeldes maoístas son muy activos en las zonas rurales del este de India.
Los rebeldes hicieron estallar una bomba y luego dispararon con ametralladoras a los vehículos de un convoy donde iban varios responsables políticos locales que volvían de una reunión.
"El balance es ahora de 23 muertos. También podemos confirmar que hay 32 heridos, en su mayoría en estado grave", dijo a la AFP el director general de la policía del estado, Ramniwas, que sólo tiene un nombre.
El primer balance había indicado 17 muertos, entre ellos cinco policías.
En su mayoría las víctimas son dirigentes del Partido del Congreso en Chhattisgarh, incluyendo su presidente, Nand Kumar Patel, y su hijo, así como Mahendra Karm, exministro del Interior del estado.
Otro exministro local, Vidya Charan Shukla, está en estado crítico, dijo una fuente oficial.
La presidenta a nivel nacional del Partido del Congreso, Sonia Gandhi, calificó los hechos de "espantosos" y condenó los ataques contra "gente normal comprometida en política".
Los rebeldes maoístas son muy activos en las zonas rurales del este de India.
