En la provincia de Fariab, en el oeste, murieron nueve hombres, posiblemente diez, en un ataque a un pueblo gobernado por un enemigo de los talibanes, dijeron miembros del consejo provincial.
Los talibanes también mataron en la provincia norteña de Baglan al menos a dos soldados en ataques a puestos de seguridad. Y en la provincia de Lawgar, en el este, abatieron hoy al gobernador interino, según datos oficiales. Mientras, en Parwan, cerca de Kabul, se produjeron fuertes enfrentamientos, aunque por el momento no hay cifras de víctimas.
Los ataques se produjeron solo unas horas después de que los talibanes anunciaran el miércoles su nueva ofensiva de verano en la que pretenden concentrarse en "las tropas invasoras" de Estados Unidos.
El anuncio llegó unas semanas después de lo que acostumbran los talibanes. Parece que los extremistas querían dejar pasar algo de tiempo después de que el presidente, Ashraf Ghani, realizara en febrero una oferta de paz, que fue acogida con esperanza por la población. Hasta ahora los talibanes no habían rechazado la oferta oficialmente.
Estados Unidos criticó por la noche el anuncio de la nueva ofensiva. Dada la "invitación histórica" de paz del presidente Ghani, no hay ninguna justificación para la campaña, dijo el secretario de Estado en funciones John J. Sullivan.
La situación en Afganistán será uno de los temas que se tratarán en la reunión de ministros de Exteriores de la OTAN que tendrá lugar el viernes en Bruselas.
Los talibanes también mataron en la provincia norteña de Baglan al menos a dos soldados en ataques a puestos de seguridad. Y en la provincia de Lawgar, en el este, abatieron hoy al gobernador interino, según datos oficiales. Mientras, en Parwan, cerca de Kabul, se produjeron fuertes enfrentamientos, aunque por el momento no hay cifras de víctimas.
Los ataques se produjeron solo unas horas después de que los talibanes anunciaran el miércoles su nueva ofensiva de verano en la que pretenden concentrarse en "las tropas invasoras" de Estados Unidos.
El anuncio llegó unas semanas después de lo que acostumbran los talibanes. Parece que los extremistas querían dejar pasar algo de tiempo después de que el presidente, Ashraf Ghani, realizara en febrero una oferta de paz, que fue acogida con esperanza por la población. Hasta ahora los talibanes no habían rechazado la oferta oficialmente.
Estados Unidos criticó por la noche el anuncio de la nueva ofensiva. Dada la "invitación histórica" de paz del presidente Ghani, no hay ninguna justificación para la campaña, dijo el secretario de Estado en funciones John J. Sullivan.
La situación en Afganistán será uno de los temas que se tratarán en la reunión de ministros de Exteriores de la OTAN que tendrá lugar el viernes en Bruselas.