"¿Cuál es el apuro? Nosotros no tenemos apuro", dijo al diario El Observador el flamante secretario de la Junta Nacional de Drogas, Milton Romani.
"La ley no impuso plazos. Yo no quiero atraparme en plazos que lleven a cometer errores. Nosotros no nos manejamos con plazos, sino con garantías para que todo salga correctamente", explicó Romani, quien asistirá en los próximos días a la sesión anual de la Comisión de Estupefacientes de Naciones Unidas en Viena para defender la ley uruguaya, cuestionada por la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE).
"El presidente me transmitió que vamos a cumplir con la ley de la mejor manera posible. Así que habrá venta en farmacias. Cuando yo asumí, Tabaré fue enfático en que la ley se va a cumplir, pero lo único que quiere es que se cumpla bien", añadió Romani al periódico.
"No queremos hacer las cosas a las apuradas. No puede confundirse el hecho de que nosotros seamos más cuidadosos, con que no haya continuidad en el proyecto. Continuidad y cumplimiento de la ley va a haber", agregó no obstante.
Durante la campaña electoral Vázquez -que asumió el poder el domingo de manos de José Mujica, promotor de la inédita ley- había indicado que le parece "insólito" que se venda marihuana en farmacias.
"Pero si la ley lo autoriza, así será", sostuvo entonces.
El domingo, en un discurso en el que anunció las medidas que adoptará en los próximos cinco años, adelantó que desarrollará acciones "muy fuertes" contra el consumo de alcohol, como las que promovió durante su primer gobierno (2005-2010) contra el tabaco, pero no mencionó en ningún momento la ley de marihuana.
La ley legalizó el autocultivo, los clubes de cannabis y la venta al público de la droga en farmacias, todo previo registro y bajo control estatal.
Pero la venta de la sustancia en farmacias aún no ha sido implementada ni se ha adjudicado la plantación a privados.