Durante la presentación de la nueva tecnología de semillas de soja Intacta RR2, el ministro de Agricultura, Norberto Yahuar, destacó el avance de las tecnologías en el sector agrícola y dijo que constituyen el principal aporte para lograr el objetivo de producir millones de toneladas de granos en 2020.
Argentina es el primer exportador mundial en aceite y harina de soja y tercero del grano de la oleaginosa.
"La sequía y la consecuente falta de alimentos está pegando no sólo en países pobres de África sino también en potencias como Estados Unidos, por lo que es clave para la Argentina resguardar la seguridad alimentaria", afirmó Yahuar a los periodistas.
El gobierno autorizó a Monsanto, que hace pocos días anunció inversiones por 365 millones de dólares en el país sudamericano, a vender a los productores locales su semilla "Intacta RR2 PRO".
Se trata de la segunda innovación en semillas de soja de la empresa, después de haber comenzado a comercializar en 1996 en el país su semilla RR1, utilizada por la mayoría de los productores agrarios.
Si bien las semillas transgénicas han sido incorporadas por los agricultores, han puesto en alerta a los ecologistas que vienen denunciando el avance de la frontera de la soja, el uso de agrotóxicos y la tendencia creciente al monocultivo por rentabilidad.
Las exportaciones argentinas del complejo sojero (poroto, aceite y harina) suman unos 20.000 millones de dólares, casi una cuarta parte del total de 84.269 millones de dólares de sus ventas al exterior en 2011, de acuerdo con cifras oficiales.