As Sisi se queda sólo después de que el martes el ex líder militar Sami Anan fuera interrogado por el Ejército la víspera y acusado de quebrantar normas militares al anunciar su candidatura sin recibir permiso previo, mientras su campaña denuncia que fue arrestado y todo indica que no podrá participar.
También Jaled Ali acusó hoy a las autoridades egipcias en una rueda de prensa en El Cairo de arrestar a miembros de su campaña y a la Comisión Electoral de mantener una postura parcial en su contra. "Todos esos indicadores apuntan al envenenamiento y daño del proceso electoral y lo vacían de sentido democrático", señaló.
Jaled Ali era el único que mantenía su candidatura a la presidencia además del presidente Abdel Fattah as Sisi, que busca un segundo mandato en los comicios del 26 al 28 de marzo. Sin embargo, Ali no había presentado aún los documentos necesarios ante la Comisión Electoral.
Ali ya había sido condenado a tres meses de cárcel por indecencia pública y se esperaba que fuera vetado si el tribunal de apelaciones que lleva su caso confirmaba la decisión judicial. En el país, los condenados en firme no pueden ser candidatos.
En un comunicado, el Ejército también acusó a Anan de "incitar explícitamente (al odio) contra el Ejército" y de falsificar documentos para aparecer en las listas de votación. Los miembros activos del Ejército no pueden presentarse a las elecciones en Egipto. La campaña del ex militar desmintió las acusaciones.
La organización defensora de derechos humanos Amnistía Internacional acusó hoy al Gobierno egipcio de eliminar a los contrincantes con posibilidades en las elecciones. "El arresto de Sami (Anan) es otro ataque descarado contra los derechos de los egipcios de libertad de expresión y participación política", dijo la organización con sede en Londres.
"Parece que Sami (Anan) ha sido detenido porque estaba generalmente considerado un serio contrincante contra el presidente", añadió en un comunicado.
El ex primer ministro egipcio, Ahmed Shafiq, al que también se consideraba un competidor con posibilidades frente a As Sisi, decidió en el último momento no presentarse a los comicios, en circunstancias poco claras. El diario "The New York Times" informó que recibió presiones.
También Mohammed Anwar Sadat, sobrino del asesinado presidente Anwar Sadat, anunció que no se presentaría a las elecciones por miedo a que sus seguidores fueran perseguidos o intimidados por las autoridades.
El único candidato que queda es el propio As Sisi, que hoy presentó oficialmente a la Comisión Electoral su candidatura.
As Sisi llegó al poder en 2014, un año después de encabezar el derrocamiento del primer presidente elegido democráticamente del país, Mohammed Morsi, de los Hermanos Musulmanes, que generaba división en Egipto.
También Jaled Ali acusó hoy a las autoridades egipcias en una rueda de prensa en El Cairo de arrestar a miembros de su campaña y a la Comisión Electoral de mantener una postura parcial en su contra. "Todos esos indicadores apuntan al envenenamiento y daño del proceso electoral y lo vacían de sentido democrático", señaló.
Jaled Ali era el único que mantenía su candidatura a la presidencia además del presidente Abdel Fattah as Sisi, que busca un segundo mandato en los comicios del 26 al 28 de marzo. Sin embargo, Ali no había presentado aún los documentos necesarios ante la Comisión Electoral.
Ali ya había sido condenado a tres meses de cárcel por indecencia pública y se esperaba que fuera vetado si el tribunal de apelaciones que lleva su caso confirmaba la decisión judicial. En el país, los condenados en firme no pueden ser candidatos.
En un comunicado, el Ejército también acusó a Anan de "incitar explícitamente (al odio) contra el Ejército" y de falsificar documentos para aparecer en las listas de votación. Los miembros activos del Ejército no pueden presentarse a las elecciones en Egipto. La campaña del ex militar desmintió las acusaciones.
La organización defensora de derechos humanos Amnistía Internacional acusó hoy al Gobierno egipcio de eliminar a los contrincantes con posibilidades en las elecciones. "El arresto de Sami (Anan) es otro ataque descarado contra los derechos de los egipcios de libertad de expresión y participación política", dijo la organización con sede en Londres.
"Parece que Sami (Anan) ha sido detenido porque estaba generalmente considerado un serio contrincante contra el presidente", añadió en un comunicado.
El ex primer ministro egipcio, Ahmed Shafiq, al que también se consideraba un competidor con posibilidades frente a As Sisi, decidió en el último momento no presentarse a los comicios, en circunstancias poco claras. El diario "The New York Times" informó que recibió presiones.
También Mohammed Anwar Sadat, sobrino del asesinado presidente Anwar Sadat, anunció que no se presentaría a las elecciones por miedo a que sus seguidores fueran perseguidos o intimidados por las autoridades.
El único candidato que queda es el propio As Sisi, que hoy presentó oficialmente a la Comisión Electoral su candidatura.
As Sisi llegó al poder en 2014, un año después de encabezar el derrocamiento del primer presidente elegido democráticamente del país, Mohammed Morsi, de los Hermanos Musulmanes, que generaba división en Egipto.