En el ámbito internacional, el papa Francisco pidió que se inicien "iniciativas de pacificación" en Siria, donde el conflicto ha dejado más de 150.000 muertos desde marzo de 2011, al tiempo que París dijo disponer de "elementos" sobre la utilización reciente de armas químicas por parte del régimen de Damasco.
Durante su visita sorpresa a Maalula, Asad visitó "el monasterio de Mar Sarkis e inspeccionó las destrucciones ocasionadas por los terroristas", señaló la televisión oficial, en alusión a los rebeldes, y emitió imágenes de la visita.
La página de la presidencia siria en Facebook mostró una fotografía de Asad al lado de un líder cristiano, con lo que parecía ser un fresco dañado de la Virgen y de Jesús entre las manos.
La televisión también mostró a Asad hablando con los soldados y los milicianos en esta ciudad a 55 km al norte de Damasco, recuperada el pasado lunes, después de haber estado en manos de los rebeldes durante cuatro meses.
"Ningún pueblo se ha enfrentado nunca a lo que enfrenta hoy Siria. Por supuesto, vuestra unidad (...) es lo que nos garantiza estas victorias", señaló. "Aunque la batalla sea larga, estamos siempre preparados para afrontar a los terroristas", añadió, tras darles la mano a los soldados.
Según la televisión, Asad también visitó la localidad cercana de Ain al Tineh, donde fue ovacionado por la multitud. "Aunque (los rebeldes) destruyan "a Siria), nosotros la reconstruiremos", lanzó.
El lunes está previsto que se anuncie la fecha de la elección presidencial, prevista durante el presente año, y de la apertura del plazo para presentar candidaturas. Asad afirmó en enero en una entrevista a la AFP que había "fuertes posibilidades" de que se presentara a su reelección.
- Contraofensiva rebelde en Homs-
El presidente sirio habló el 3 de abril de un vuelco crucial a favor del régimen, tras varios reveses de los rebeldes, en particular en la región de Qalamun, en la frontera con Líbano.
Pero los insurgentes, que suman varios éxitos recientes, en particular en la región costera de Latakia, bastión de Asad, retomaron el domingo la iniciativa en Homs.
Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), lanzaron una contraofensiva en el centro de Homs, donde tomaron el control de varios edificios en zonas controladas por el régimen.
Las fuerzas del régimen de Bashar al Asad habían lanzado hace casi una semana el asalto contra la ciudad vieja de Homs, el último bastión de los insurgentes en esta ciudad, asediada por el ejército desde hace dos años.
Los rebeldes "se apoderaron de varios edificios en el sector de Jeb al Jandali" al este de la ciudad vieja asediada, indicó Rami Abdel Rhamane, director del OSDH que se basa en una amplia red de militantes y de fuentes médicas.
El sábado, cinco militares murieron en un atentado suicida llevado a cabo por el Frente al Nosra (rama de Al Qaida aliada a los rebeldes) contra un puesto de control del ejército en Jeb al Jandali.
La violencia sacudió también el domingo la plaza Arnus, en el centro de Damasco, donde un hombre y sus dos hijos murieron en un ataque con obuses de mortero y en Alepo (norte) 10 personas murieron en bombardeos contra los barrios rebeldes, según el OSDH.
Dos obuses disparados desde Siria hirieron a dos civiles en el sur de Turquía, según la agencia de prensa turca Dogan.
- "La audacia de negociar" -
En el Vaticano, el papa Francisco pidió a los combatientes sirios que tengan "la audacia de negociar la paz" y llamó a cesar el uso de "la fuerza para sembrar la muerte, sobre todo contra la población indefensa" y a permitir el acceso de las poblaciones "a las ayudas humanitarias".
Mientras tanto, los cuatro periodistas franceses, liberados después de 10 meses de cautiverio en Siria, se reencontraron el domingo con sus familiares en Francia, donde fueron acogidos por el presidente francés, François Hollande.
El presidente indicó disponer de "algunos elementos" que apuntan a la utilización reciente de armas químicas por parte del régimen en el noroeste de Siria, cerca de Líbano. "Pero no dispongo de pruebas por lo que no os las puedo dar", añadió.
En el marco de un acuerdo entre Rusia y Estados Unidos, que evitó bombardeos estadounidenses, Damasco se comprometió a destruir su arsenal de armas químicas antes del 30 de junio.
La coordinadora de la misión conjunta de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas y la ONU, Sigrid Kaag, indicó en un comunicado el sábado que Siria había evacuado o destruido cerca del 80% de su arsenal químico.