Mohamed Houli Chemlal, de 21 años, dijo también que este incidente, ocurrido un día antes de los atentados mientras manipulaban explosivos, truncó sus intenciones y aseguró desconocer que había un plan b: el atropello masivo que se llevó a cabo en el centro de la ciudad dejando 13 muertos y más de un centenar de heridos.
Tras escucharle, el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu decretó prisión provisional comunicada sin fianza para el detenido, así como para otro de sus compañeros, Driss Oukabir. Les imputa presuntos delitos de integración en organización terrorista, de asesinatos y lesiones de carácter terrorista y también de depósito de explosivos y estragos en el caso de Mohamed Houli.
Solo uno de los cuatro arrestados, Mohamed Aalla, quedó en libertad provisional al considerar el juez que los indicios que lo relacionan con los hechos no son sólidos, mientras que otro, Salh Karib, permanecerá detenido hasta que el juzgado adopte -en un máximo de 72 horas- una resolución a raíz del resultado de pesquisas en curso.
Los cuatro detenidos llegaron poco después de las 8:30 horas (6:30 GMT) a la sede de la Audiencia Nacional, tribunal competente para juzgar delitos de terrorismo. Mientras que tres de ellos vestían ropa informal, Mohamed Houli Chemlal llevaba el pijama del hospital en el que fue ingresado tras la explosión en la base de la célula.
Según informó el diario "El Mundo", este detenido dijo que la idea inicial era atentar contra la basílica de la Sagrada Familia de Barcelona, visitada por más de cuatro millones de turistas cada año.
Además, responsabilizó de los planes al imán Abdelbaki Es Satty, presunto "cerebro" del grupo y fallecido en la explosión que tuvo lugar un día antes de los atentados en la vivienda en la que los preparaban, en la localidad catalana de Alcanar.
También precisó, según fuentes citadas por la agencia Europa Press, que su presunto líder quería inmolarse con explosivos.
En consonancia con lo declarado por el detenido, el juez consideró en su auto que en la vivienda de Alcanar "se estaban confeccionando artefactos explosivos con la finalidad de cometer una acción terrorista de gran envergadura" y que la explosión cambió los planes.
Fue entonces, recoge el magistrado, cuando los presuntos terroristas decidieron alquilar furgonetas para cometer atropellos y comprar, horas antes del ataque de Cambrils, cuatro cuchillos y un hacha, con los que mataron a una persona e hirieron a seis en esta localidad.
En el auto dictado por Andreu aparecen también otros detalles de la investigación hasta ahora desconocidos, como el hallazgo de un libro con una "breve carta a los Soldados del Estado Islámico en la tierra del Ándalus" y con el nombre del imán considerado líder de la célula.
El segundo en declarar hoy ante el juez fue Driss Oukabir, hermano de uno de los cinco terroristas abatidos en la madrugada del viernes por la Policía en Cambrils cuando perpetraban el ataque. El juez explicó en su auto que el detenido alquiló la furgoneta con la que horas antes se atropelló a decenas de personas en Barcelona.
Otro de los detenidos, Mohamed Aalla, también es hermano de otros de los abatidos en Cambrils. Hoy explicó que el vehículo Audi 3 con el que se cometió el ataque era de su familiar pese a estar a su nombre. El juez lo dejó en libertad de forma provisional.
Por último, Salh El Karib, reconoció que intermedió en la compra de unos billetes a Marruecos para Driss Oukabir y para el imán fallecido y se desvinculó de los ataques. Permanecerá detenido hasta que el juzgado resuelva su situación tras unas pesquisas en curso.
De los 12 presuntos terroristas que integraban la célula, según la Policía, ocho están muertos. Los agentes abatieron el lunes a Younes Abouyaaqoub, supuesto autor material del atropello masivo que dejó 13 muertos y más de 100 heridos el jueves en Barcelona.
El presunto terrorista, de 22 años, había matado tras el ataque a otro hombre, cuyo coche utilizó para huir. Cuatro días depués, fue localizado a 50 kilómetros de Barcelona. Antes de ser tiroteado por los agentes el lunes, el joven gritó "dios es más grande".
Ahora se investiga si alguien pudo ayudarle en su fuga, ya que apareció con ropa distinta a la del día del atentado y con un cinturón de explosivos falso adherido al cuerpo.
La Policía también abatió a otros cinco de los presuntos integrantes de la célula cuando éstos perpetraban el ataque de Cambrils.
A todos ellos se suman los dos muertos en la vivienda de Alcanar.
Aunque las autoridades dan por desarticulada la célula, la investigación sigue en pie. Ahora se centra en las posibles conexiones internacionales que pudieron tener sus integrantes.
El ministro de Interior de Francia, Gérard Collomb, confirmó hoy en una entrevista que los presuntos terroristas estuvieron en París poco antes de los atentados. El vehículo con el que perpetraron el atentado de Cambrils fue detectado al sur de la capital francesa.
Tras escucharle, el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu decretó prisión provisional comunicada sin fianza para el detenido, así como para otro de sus compañeros, Driss Oukabir. Les imputa presuntos delitos de integración en organización terrorista, de asesinatos y lesiones de carácter terrorista y también de depósito de explosivos y estragos en el caso de Mohamed Houli.
Solo uno de los cuatro arrestados, Mohamed Aalla, quedó en libertad provisional al considerar el juez que los indicios que lo relacionan con los hechos no son sólidos, mientras que otro, Salh Karib, permanecerá detenido hasta que el juzgado adopte -en un máximo de 72 horas- una resolución a raíz del resultado de pesquisas en curso.
Los cuatro detenidos llegaron poco después de las 8:30 horas (6:30 GMT) a la sede de la Audiencia Nacional, tribunal competente para juzgar delitos de terrorismo. Mientras que tres de ellos vestían ropa informal, Mohamed Houli Chemlal llevaba el pijama del hospital en el que fue ingresado tras la explosión en la base de la célula.
Según informó el diario "El Mundo", este detenido dijo que la idea inicial era atentar contra la basílica de la Sagrada Familia de Barcelona, visitada por más de cuatro millones de turistas cada año.
Además, responsabilizó de los planes al imán Abdelbaki Es Satty, presunto "cerebro" del grupo y fallecido en la explosión que tuvo lugar un día antes de los atentados en la vivienda en la que los preparaban, en la localidad catalana de Alcanar.
También precisó, según fuentes citadas por la agencia Europa Press, que su presunto líder quería inmolarse con explosivos.
En consonancia con lo declarado por el detenido, el juez consideró en su auto que en la vivienda de Alcanar "se estaban confeccionando artefactos explosivos con la finalidad de cometer una acción terrorista de gran envergadura" y que la explosión cambió los planes.
Fue entonces, recoge el magistrado, cuando los presuntos terroristas decidieron alquilar furgonetas para cometer atropellos y comprar, horas antes del ataque de Cambrils, cuatro cuchillos y un hacha, con los que mataron a una persona e hirieron a seis en esta localidad.
En el auto dictado por Andreu aparecen también otros detalles de la investigación hasta ahora desconocidos, como el hallazgo de un libro con una "breve carta a los Soldados del Estado Islámico en la tierra del Ándalus" y con el nombre del imán considerado líder de la célula.
El segundo en declarar hoy ante el juez fue Driss Oukabir, hermano de uno de los cinco terroristas abatidos en la madrugada del viernes por la Policía en Cambrils cuando perpetraban el ataque. El juez explicó en su auto que el detenido alquiló la furgoneta con la que horas antes se atropelló a decenas de personas en Barcelona.
Otro de los detenidos, Mohamed Aalla, también es hermano de otros de los abatidos en Cambrils. Hoy explicó que el vehículo Audi 3 con el que se cometió el ataque era de su familiar pese a estar a su nombre. El juez lo dejó en libertad de forma provisional.
Por último, Salh El Karib, reconoció que intermedió en la compra de unos billetes a Marruecos para Driss Oukabir y para el imán fallecido y se desvinculó de los ataques. Permanecerá detenido hasta que el juzgado resuelva su situación tras unas pesquisas en curso.
De los 12 presuntos terroristas que integraban la célula, según la Policía, ocho están muertos. Los agentes abatieron el lunes a Younes Abouyaaqoub, supuesto autor material del atropello masivo que dejó 13 muertos y más de 100 heridos el jueves en Barcelona.
El presunto terrorista, de 22 años, había matado tras el ataque a otro hombre, cuyo coche utilizó para huir. Cuatro días depués, fue localizado a 50 kilómetros de Barcelona. Antes de ser tiroteado por los agentes el lunes, el joven gritó "dios es más grande".
Ahora se investiga si alguien pudo ayudarle en su fuga, ya que apareció con ropa distinta a la del día del atentado y con un cinturón de explosivos falso adherido al cuerpo.
La Policía también abatió a otros cinco de los presuntos integrantes de la célula cuando éstos perpetraban el ataque de Cambrils.
A todos ellos se suman los dos muertos en la vivienda de Alcanar.
Aunque las autoridades dan por desarticulada la célula, la investigación sigue en pie. Ahora se centra en las posibles conexiones internacionales que pudieron tener sus integrantes.
El ministro de Interior de Francia, Gérard Collomb, confirmó hoy en una entrevista que los presuntos terroristas estuvieron en París poco antes de los atentados. El vehículo con el que perpetraron el atentado de Cambrils fue detectado al sur de la capital francesa.