El acuerdo, condenado por las autoridades kurdas, dispone que BP realice análisis en el campo de Kirkuk, pero también abre la puerta a que el grupo británico trabaje para aumentar la producción de este yacimiento.
El desarrollo de este yacimiento es uno de los objetivos de Irak, que quiere aumentar su producción de petróleo.
Pero varias disputas oponen al gobierno central de Bagdad y al Kurdistán iraquí, en particular la distribución de los ingresos petroleros y la soberanía de los alrededores de Kirkuk, una región rica en petróleo, que los kurdos quieren incluir en el Kurdistán.
"El contrato prevé estudios del campo petrolífero (...) La empresa deberá realizar estos estudios en un lapso de 18 meses", dijo a la AFP un alto responsable de la compañía nacional iraquí North Oil.
"Una vez que se presente el informe y se confirme la posibilidad de aumentar la producción del campo, un contrato de servicio por 20 años será firmado", añadió este responsable bajo condición de anonimato.
El desarrollo de este yacimiento es uno de los objetivos de Irak, que quiere aumentar su producción de petróleo.
Pero varias disputas oponen al gobierno central de Bagdad y al Kurdistán iraquí, en particular la distribución de los ingresos petroleros y la soberanía de los alrededores de Kirkuk, una región rica en petróleo, que los kurdos quieren incluir en el Kurdistán.
"El contrato prevé estudios del campo petrolífero (...) La empresa deberá realizar estos estudios en un lapso de 18 meses", dijo a la AFP un alto responsable de la compañía nacional iraquí North Oil.
"Una vez que se presente el informe y se confirme la posibilidad de aumentar la producción del campo, un contrato de servicio por 20 años será firmado", añadió este responsable bajo condición de anonimato.