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Política
Los candidatos que participaron en el debate
"Sacamos a 28 millones de personas de la miseria", argumentó la favorita en las encuestas, la oficialista ex jefa de gabinete de Lula, Dilma Rousseff, de 62 años.
"Hay varios desafíos (todavía) por delante", añadió. Por ejemplo "garantizar que Brasil tenga mayor desarrollo y que el proceso de ascensión social de la población brasileña continúe", sostuvo.
"No conseguimos resolver todos los problemas de Brasil, pero nos encaminamos", concluyó Rousseff.
Ya el segundo en los sondeos, el socialdemócrata ex gobernador del estado de Sao Paulo, José Serra, de 68 años, dijo que el mayor logro del actual gobierno fue mantener el plan monetario instalado por los gobiernos anteriores de su Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) que, aseguró, fueron la base del éxito económico de la gestión Lula.
El mayor logro del Ejecutivo saliente, respondió Serra a su primera pregunta, "fue no tirar el plan real por la ventana". Esa iniciativa creó la actual moneda brasileña al tiempo que puso el control de la inflación como una prioridad.
Lula "se concentró en los primeros años en mantener la estabilidad que fue conquistada por los gobiernos anteriores de Itamar Franco (1992-1994) y Fernando Henrique" Cardoso (1995-2002), argumentó. "Gracias a eso pudo aprovechar (una) coyuntura excepcional" internacional, concluyó.
Serra, que intenta acortar los 23 puntos de diferencia en los sondeos de intención de voto con Rousseff (se ubican 50% a 27%), sostuvo que "el mayor fracaso (del actual gobierno) fue el 'mensalao", un esquema de compra de votos en el Congreso del que se benefició el gobernante Partido de los Trabajadores (PT) en 2006.
El escándalo terminó con la cúpula del PT y algunos de los principales colaboradores del mandatario.
El candidato opositor también mencionó el caso que centra la atención de la campaña electoral para el 3 de octubre, sobre violaciones al secreto fiscal de miembros de su familia y de su partido a manos de integrantes del PT, y acusó al gobierno de "usar el aparato legal para proteger a sus compañeros y perseguir a los adversarios".
Rousseff por su parte, insistió en que el gobierno actual "rehabilitó los mecanismos de control" federales, y defendió el fortalecimiento institucional y la transparencia de los organismos de gobierno.
La ex funcionaria pidió asimismo durante el debate, responder específicamente a las acusaciones de Serra, cuya campaña incluso presentó un pedido de impugnación de la candidatura oficialista por los casos de violaciones al secreto fiscal, recurso que fue rechazado por la justicia electoral.
"No pasaré a la historia como la calumniadora de esta campaña", se defendió la ex ministra, y recordó que su campaña presentó una querella judicial contra su rival por difamación.
De su lado, la candidata del Partido Verde, ex ministra de Medio Ambiente del gobierno saliente Marina Silva, de 52 años, dijo que el actual gobierno mostró "falta de capacidad de integrar la cuestión ambiental" en sus prioridades.
Silva añadió además que "40% de los niños (brasileños) no terminan la educación secundaria y lamentó que "las páginas policiales siempre están presentes asociadas con la corrupción" en los gobiernos brasileños.
"Hay varios desafíos (todavía) por delante", añadió. Por ejemplo "garantizar que Brasil tenga mayor desarrollo y que el proceso de ascensión social de la población brasileña continúe", sostuvo.
"No conseguimos resolver todos los problemas de Brasil, pero nos encaminamos", concluyó Rousseff.
Ya el segundo en los sondeos, el socialdemócrata ex gobernador del estado de Sao Paulo, José Serra, de 68 años, dijo que el mayor logro del actual gobierno fue mantener el plan monetario instalado por los gobiernos anteriores de su Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) que, aseguró, fueron la base del éxito económico de la gestión Lula.
El mayor logro del Ejecutivo saliente, respondió Serra a su primera pregunta, "fue no tirar el plan real por la ventana". Esa iniciativa creó la actual moneda brasileña al tiempo que puso el control de la inflación como una prioridad.
Lula "se concentró en los primeros años en mantener la estabilidad que fue conquistada por los gobiernos anteriores de Itamar Franco (1992-1994) y Fernando Henrique" Cardoso (1995-2002), argumentó. "Gracias a eso pudo aprovechar (una) coyuntura excepcional" internacional, concluyó.
Serra, que intenta acortar los 23 puntos de diferencia en los sondeos de intención de voto con Rousseff (se ubican 50% a 27%), sostuvo que "el mayor fracaso (del actual gobierno) fue el 'mensalao", un esquema de compra de votos en el Congreso del que se benefició el gobernante Partido de los Trabajadores (PT) en 2006.
El escándalo terminó con la cúpula del PT y algunos de los principales colaboradores del mandatario.
El candidato opositor también mencionó el caso que centra la atención de la campaña electoral para el 3 de octubre, sobre violaciones al secreto fiscal de miembros de su familia y de su partido a manos de integrantes del PT, y acusó al gobierno de "usar el aparato legal para proteger a sus compañeros y perseguir a los adversarios".
Rousseff por su parte, insistió en que el gobierno actual "rehabilitó los mecanismos de control" federales, y defendió el fortalecimiento institucional y la transparencia de los organismos de gobierno.
La ex funcionaria pidió asimismo durante el debate, responder específicamente a las acusaciones de Serra, cuya campaña incluso presentó un pedido de impugnación de la candidatura oficialista por los casos de violaciones al secreto fiscal, recurso que fue rechazado por la justicia electoral.
"No pasaré a la historia como la calumniadora de esta campaña", se defendió la ex ministra, y recordó que su campaña presentó una querella judicial contra su rival por difamación.
De su lado, la candidata del Partido Verde, ex ministra de Medio Ambiente del gobierno saliente Marina Silva, de 52 años, dijo que el actual gobierno mostró "falta de capacidad de integrar la cuestión ambiental" en sus prioridades.
Silva añadió además que "40% de los niños (brasileños) no terminan la educación secundaria y lamentó que "las páginas policiales siempre están presentes asociadas con la corrupción" en los gobiernos brasileños.
