UNA DE CAL Y OTRA DE ARENA
Las declaraciones contradictorias de Brown, de defender el derecho de Irán a la explotación civil de la energía nuclear mientras por otra parte tacha de “inadmisible” los planes actuales de Teherán en este sentido, han sido proferidas a pesar de las innumerables ocasiones en las que las autoridades iraníes han salido al paso por activa y por pasiva para asegurar que no se está desarrollando en Irán ningún programa atómico de armas nucleares, amén de que los organismos e instituciones internacionales, como la Agencia Internacional de la Energía Atómica —bajo cuyos controles se desarrolla el programa—, han constatado no haber hallado ningún indicio de desvío del programa hacia objetivos que no sean los civiles.
A pesar de todo ello, en el texto de la conferencia viene que “Irán se halla ante dos opciones: o continuar con la situación, con lo que se enfrentará con más sanciones y más severas, o que cambie de rumbo y tener un programa nuclear pacífico bajo el control de la ONU para la producción de energía, en cuyo caso los ciudadanos iraníes sacaran el mayor de los provechos.”
Las declaraciones contradictorias de Brown, de defender el derecho de Irán a la explotación civil de la energía nuclear mientras por otra parte tacha de “inadmisible” los planes actuales de Teherán en este sentido, han sido proferidas a pesar de las innumerables ocasiones en las que las autoridades iraníes han salido al paso por activa y por pasiva para asegurar que no se está desarrollando en Irán ningún programa atómico de armas nucleares, amén de que los organismos e instituciones internacionales, como la Agencia Internacional de la Energía Atómica —bajo cuyos controles se desarrolla el programa—, han constatado no haber hallado ningún indicio de desvío del programa hacia objetivos que no sean los civiles.
A pesar de todo ello, en el texto de la conferencia viene que “Irán se halla ante dos opciones: o continuar con la situación, con lo que se enfrentará con más sanciones y más severas, o que cambie de rumbo y tener un programa nuclear pacífico bajo el control de la ONU para la producción de energía, en cuyo caso los ciudadanos iraníes sacaran el mayor de los provechos.”