El gobierno autorizó para este año la matanza de 338.200 focas, 55.000 más que el año pasado.
Dependiendo de las condiciones del tiempo, la cacería podría continuar esta semana entre las islas Magdalena y cabo Bretón. Según la emisora de radio CFJW, en esta región están autorizados a cazar unos 50 hombres de las provincias canadienses vecinas de Nueva Escocia, Nuevo Brunswick y la isla del Príncipe Eduardo.
La cruel matanza provocó el rechazo de diversas organizaciones. El Grupo Animalista de Madrid (GAM) convocó a una concentración hoy frente a la Embajada canadiense en Madrid y para pedir al Parlamento europeo que apruebe un informe en el que se propone la prohibición de comerciar con productos derivados del animal marino.
Desde la asociación aseguraron que esta convocatoria "puede tener una importancia decisiva porque el comercio de productos derivados de foca podría quedar terminantemente prohibido en toda la Unión Europea si se gana una votación para aprobar un informe del Comité de Mercado Interior del Parlamento europeo que propone el veto comercial a los productos derivados de las focas".
Esta concentración se suma al acto protagonizado por más de un centenar de activistas que, convocados por la Fundación Equanimal, se desnudaron en la Puerta del Sol el pasado 15 de este mes como protesta a la masacre de cientos de miles de focas en Canadá.