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Política
Pinochet
Los militares uruguayos condenados son los coroneles Tomás Casella Santos (8 años), Eduardo Radaelli Copolla (5 años) y Wellington Sarli Pose (3 años), quienes deberán cumplir con prisión efectiva, según señala la resolución.
Respecto de los 11 militares chilenos condenados, dos de ellos se encuentran en servicio activo, según informaron medios locales.
El fallo fue emitido por el juez Alejandro Madrid, quien inició el proceso hace dos años. De acuerdo con la sentencia, el asesinato de Berríos se realizó "durante los años 1991 a 1993 (...) durante un período de plena vigencia del orden constitucional, por personal militar en servicio activo de los Ejércitos de Chile y Uruguay".
Los sentenciados aún pueden apelar ante una segunda instancia en la Corte de Apelaciones y, luego, de ser el caso, ante la Corte Suprema.
El químico Eugenio Berríos, ex agente de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA) -la temida policía secreta de la dictadura- fue responsabilizado de la fabricación en Chile del denominado gas sarín, veneno utilizado presumiblemente contra los opositores del régimen.
Tras la caída de Pinochet, Berríos huyó a Uruguay, donde fue asesinado y su cadáver apareció en 1995 en la playa del balneario El Pinar de ese país.
Los oficiales uruguayos llegaron a Chile en abril de 2006, luego de ser extraditados. Al arribar a Santiago permanecieron en prisión por varios meses, pero gozaron de libertad con impedimento de salida del país.
Unas 3.000 personas murieron o desaparecieron a manos de la dictadura de Pinochet (1973-1990). Unos 560 militares son procesados por esos crímenes.
Respecto de los 11 militares chilenos condenados, dos de ellos se encuentran en servicio activo, según informaron medios locales.
El fallo fue emitido por el juez Alejandro Madrid, quien inició el proceso hace dos años. De acuerdo con la sentencia, el asesinato de Berríos se realizó "durante los años 1991 a 1993 (...) durante un período de plena vigencia del orden constitucional, por personal militar en servicio activo de los Ejércitos de Chile y Uruguay".
Los sentenciados aún pueden apelar ante una segunda instancia en la Corte de Apelaciones y, luego, de ser el caso, ante la Corte Suprema.
El químico Eugenio Berríos, ex agente de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA) -la temida policía secreta de la dictadura- fue responsabilizado de la fabricación en Chile del denominado gas sarín, veneno utilizado presumiblemente contra los opositores del régimen.
Tras la caída de Pinochet, Berríos huyó a Uruguay, donde fue asesinado y su cadáver apareció en 1995 en la playa del balneario El Pinar de ese país.
Los oficiales uruguayos llegaron a Chile en abril de 2006, luego de ser extraditados. Al arribar a Santiago permanecieron en prisión por varios meses, pero gozaron de libertad con impedimento de salida del país.
Unas 3.000 personas murieron o desaparecieron a manos de la dictadura de Pinochet (1973-1990). Unos 560 militares son procesados por esos crímenes.
