"Plonger es una novela para hacer comprender que la cultura del Viejo Mundo es eterna, y necesaria para comprender el presente y el porvenir", dijo el autor a la AFP tras recibir el galardón de la institución de las letras francesas fundada por Richelieu en 1635.
El premio fue atribuido por 11 votos contra cuatro para Thomas B. Reverdy por su novela "Los Evaporados" y tres para Capucine Motte por "Apollinaria, una pasión rusa", precisó la Academia.
Christophe Ono-dit-Biot nació en enero de 1975 en Le Havre (oeste de Francia). Profesor de literatura, es director adjunto de la redacción del semanario Le Point, donde dirige las páginas dedicadas a la cultura.
Ha publicado otras cuatro novelas: "Désagrégé(e)", en 2000, que recibió el premio La Rochefoucauld, "Interdit à toute femme et à toute femelle" (Prohibido a toda mujer y toda hembra), en 2002, "Génération spontanée" (Generación espontánea) en 2004.
Ha alcanzado cierta notoriedad con "Birmane", (Birmana) premio Interallié 2007, recompensa que dedicó al pueblo birmano. El protagonista de "Birmana" se llama César, igual que el de "Plonger".
"La encontraron así. Desnuda y muerta. En la playa de un país árabe. Con la sal formando cristales sobre su cuerpo", escribe el autor en preámbulo a esta densa novela de 400 páginas en la que el mar y los tiburones ocupan un lugar enigmático.
César es periodista. Investiga sobre la muerte de su esposa, a quien amó apasionadamente, pero que se fue con rumbo desconocido abandonando al hijo de ambos, Héctor. De hecho, su padre está releyendo la Ilíada.
Ella es una talentosa fotógrafa española oriunda de Gijón, en Asturias. Dotada de un temperamento fogoso y humor inestable, la mujer se llama Paz. Pero "una pareja, es la guerra", afirma el narrador.
De temperamento solar y gran entereza, Paz se siente asfixiada en Europa. Él en cambio, viejo aventurero, está más atado al Viejo Continente, tras quedar traumado por algunos reportajes en zonas difíciles.
Visita museos y rememora los lugares lejanos que conoció, donde halló refugio en la belleza.
La zambullida de ambos en el amor comienza con un malentendido. César se equivocó sobre el sentido de las fotografías de Paz en un artículo elogioso publicado en su diario para conquistarla.
Luego viene la pasión, la sensualidad, y juntos el encantamiento por el arte y la literatura. Dos años de felicidad antes de que comiencen las disputas.
En Venecia, la pareja comienza a tener problemas. Paz le anuncia que no quiere tener un hijo, porque ya ha adoptado un tiburón, asegura. Cuando nace su hijo Héctor un poco más tarde, será la muerte de su amor. "Parece que el ser humano se desvanece a los ojos del otro como se agotan los yacimientos de oro", escribe Ono-dit-Biot.
Para su hijo, a quien debe la verdad --su verdad-- acerca de su madre, remonta al origen de su amor, el encuentro, los inicios, y luego el ascenso de Paz en el mundo del arte, el nacimiento de Héctor y el misterio que rodea la muerte de la mujer.
De Europa al país de Aladino, de los museos a las profundidades del mar, "Plonger" es la historia de una pareja con sed de absoluto en una época en la que es cada vez más difícil amar y deshacerse de lo que no es esencial.