José Saramago
"Lo llamaba el libro perdido y hallado en el tiempo", comentó este jueves su viuda Pilar del Río, durante la presentación del libro en la Casa de América de Madrid.
"Claraboya" la escribió un joven Saramago treintañero en los años 50, pero en esta historia que relata la vida de un grupo de inquilinos de un edificio lisboeta, "se anuncia el mundo del gran autor Saramago".
Saramago entregó el manuscrito de esta novela a través de un amigo a una editorial portuguesa en 1953 sin recibir ninguna respuesta, hasta que en 1989 siendo ya un autor consagrado, la editorial se puso en contacto con él para decirle que habían encontrado el manuscrito durante una mudanza de sus instalaciones y sería un honor publicarla.
El autor de "Ensayo sobre la ceguera" rechazó la oferta, recuperó su manuscrito y se negó a que la novela fuera editada mientras él viviera.
"Nos dijo que no quería que fuera publicada en vida, pero que quien estuviera detrás cuando muriera, que hiciera lo que creyera conveniente. Todos sabíamos, yo creo que también Saramago, que lo conveniente era que se publicara", relató Pilar del Río.
La viuda del escritor, fallecido en junio de 2010, mostró unos cuadernos con las anotaciones que hacía Saramago mientras escribía la novela, así como el manuscrito original de la obra y el que envió a la editorial que recuperó pasados 47 años.
"Saramago sufrió mucho con ese desprecio", dijo su viuda, recordando que tras aquello, el autor tardaría 20 años en volver a escribir una novela.
"Claraboya" es una "novela de transgresión", dice Pilar del Río, quien cree que la editorial portuguesa no se atrevió a editarla porque "la leyeron y era una novela dura para la época".
"Es un libro donde la familia que es el pilar de la sociedad es un poco un nido de víboras. Hay violación, amores lésbicos, malos tratos... ¿ Eso lo podía soportar la sociedad portuguesa de los 50? Yo creo que no", añadió la viuda.
"Mi suposición es que lo guardaban para tiempos mejores, pero entonces nadie contaba con que (el dictador Antonio) Salazar duraría tanto", explicó Pilar del Río, quien, no obstante, insistió en que "si alguien te ha entregado el fruto de su trabajo, lo mínimo es decirle algo".
El libro se publica tal y como lo entregó Saramago en 1953, ya que tras recuperarlo, el autor no volvió a reelerlo o modificarlo.
"Saramago no leyó el libro nunca después de haberlo recuperado, pero sabía que tenía interés por la época", muy similar a la actual, según Del Río, para quien, entonces como ahora la gente "está todo el tiempo contando el dinero y hablando de la situación internacional".
"Claraboya", que ya ha sido editada en Brasil y Portugal, sale ahora en España y el resto de latinoamérica publicada por la editorial Alfaguara, mientras están ya listas traducciones en otras lenguas que pronto saldrán a la venta, como la italiana, que debería presentarse en la próxima feria del libró de Turín.
"Claraboya" la escribió un joven Saramago treintañero en los años 50, pero en esta historia que relata la vida de un grupo de inquilinos de un edificio lisboeta, "se anuncia el mundo del gran autor Saramago".
Saramago entregó el manuscrito de esta novela a través de un amigo a una editorial portuguesa en 1953 sin recibir ninguna respuesta, hasta que en 1989 siendo ya un autor consagrado, la editorial se puso en contacto con él para decirle que habían encontrado el manuscrito durante una mudanza de sus instalaciones y sería un honor publicarla.
El autor de "Ensayo sobre la ceguera" rechazó la oferta, recuperó su manuscrito y se negó a que la novela fuera editada mientras él viviera.
"Nos dijo que no quería que fuera publicada en vida, pero que quien estuviera detrás cuando muriera, que hiciera lo que creyera conveniente. Todos sabíamos, yo creo que también Saramago, que lo conveniente era que se publicara", relató Pilar del Río.
La viuda del escritor, fallecido en junio de 2010, mostró unos cuadernos con las anotaciones que hacía Saramago mientras escribía la novela, así como el manuscrito original de la obra y el que envió a la editorial que recuperó pasados 47 años.
"Saramago sufrió mucho con ese desprecio", dijo su viuda, recordando que tras aquello, el autor tardaría 20 años en volver a escribir una novela.
"Claraboya" es una "novela de transgresión", dice Pilar del Río, quien cree que la editorial portuguesa no se atrevió a editarla porque "la leyeron y era una novela dura para la época".
"Es un libro donde la familia que es el pilar de la sociedad es un poco un nido de víboras. Hay violación, amores lésbicos, malos tratos... ¿ Eso lo podía soportar la sociedad portuguesa de los 50? Yo creo que no", añadió la viuda.
"Mi suposición es que lo guardaban para tiempos mejores, pero entonces nadie contaba con que (el dictador Antonio) Salazar duraría tanto", explicó Pilar del Río, quien, no obstante, insistió en que "si alguien te ha entregado el fruto de su trabajo, lo mínimo es decirle algo".
El libro se publica tal y como lo entregó Saramago en 1953, ya que tras recuperarlo, el autor no volvió a reelerlo o modificarlo.
"Saramago no leyó el libro nunca después de haberlo recuperado, pero sabía que tenía interés por la época", muy similar a la actual, según Del Río, para quien, entonces como ahora la gente "está todo el tiempo contando el dinero y hablando de la situación internacional".
"Claraboya", que ya ha sido editada en Brasil y Portugal, sale ahora en España y el resto de latinoamérica publicada por la editorial Alfaguara, mientras están ya listas traducciones en otras lenguas que pronto saldrán a la venta, como la italiana, que debería presentarse en la próxima feria del libró de Turín.