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El viernes, en el Estadio Olímpico de Rio, los rusos no estarán presentes pero siguen ocupando un lugar protagonista en el evento.
"He ido a visitar la Villa Olímpica el lunes y les puedo asegurar que las conversaciones entre los atletas se centran más en la calidad de la comida o de las habitaciones que sobre la presencia o no de los rusos", bromeó Sebastian Coe en rueda de prensa.
Pero el británico sabe que por ejemplo la ausencia de la zarina rusa de la pértiga, Yelena Isinbayeva, que nunca dio positivo, y la presencia al mismo tiempo del estadounidense Justin Gatlin, dos veces suspendido, puede contaminar el ambiente en Rio-2016.
Sobre todo si Gatlin reconquista el título de campeón olímpico de 100 metros el domingo.
"Ustedes saben lo que pienso del caso Gatlin. Pero es elegible, las reglas son así, y se le debe acordar la cortesía que se acuerda a cualquier atleta que es elegible", señaló Coe.
Del mismo modo, prefirió ser positivo con Rusia en su caso de dopaje orquestado por el Estado, que le impedirá competir en el atletismo de Rio-2016, al estar suspendido por la IAAF desde noviembre de 2015.
"El objetivo debe ser reintegrar a Rusia", afirmó Coe.
- Sin plazos para readmisión de Rusia -
El presidente de la IAAF, que estimó que Rusia "abandonó de manera cataclísmica a sus atletas", indicó sin embargo que "no existe un marco establecido en cuanto a plazos para su reintegro" en el organismo que dirige.
Coe se expresaba por primera vez en Rio de Janeiro, escenario de los Juegos, cuando el atletismo, deporte olímpico número uno, comienza el viernes.
"A partir del momento en que tomamos la decisión de suspender a la federación rusa, se puso en marcha un proceso. Se establecieron unos criterios. La prioridad es reintroducir a esta federación. El objetivo debe ser reintegrar a Rusia", declaró Coe.
La suspensión de la Federación Rusa de Atletismo (ARAF) se tradujo en la casi ausencia total de atletas rusos en los Juegos de Rio, con excepción de una sola 'repescada', la especialista de salto largo Daria Klishina, que se entrena desde finales de 2013 en Estados Unidos.
Solo los rusos que pudieran probar que no estaban relacionados con el sistema, es decir lo que se entrenaran en el extranjero, podían ser repescados.
En total, de los 68 atletas seleccionados por Rusia, 67 de ellos, incluida Isinbayeva, fueron excluidos de los Juegos, una decisión confirmada después por el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) de Lausana.
"Me temo que Rusia abandonó de manera cataclísmica a sus atletas", confió Coe. "Hemos fijado criterios de reintegro, pero no hay un marco establecido en cuanto a plazos", precisó, interrogado sobre un eventual calendario.
La ARAF debe convencer al grupo de trabajo creado especialmente en el seno de la IAAF sobre su capacidad a respetar el código mundial antidopaje.
El próximo año, en 2017, la IAAF organiza el Mundial de atletismo en Londres y la duda es saber si Rusia estará presente.
