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Política
Karel De Ducht
De Ducht mostró en una entrevista concedida a la radio belga VRT su escepticismo acerca de las posibilidades de éxito de las negociaciones directas llevadas a cabo entre la entidad sionista y la Autoridad Palestina, señalando que el primer ministro israelí “no es ciertamente una paloma”. De Gucht explicó: “La influencia del lobby judío en el Capitolio no debe ser subestimada. Es el grupo de presión más organizado. No hay que subestimar la influencia del lobby judío sobre la política norteamericana, ya sea en el campo demócrata o en el republicano.”
“No debemos subestimar la opinión del judío medio fuera de Israel,” en el que existe la “creencia de tener razón”, dijo De Gucht. “No es fácil tener una conversación racional ni siquiera con un judío moderado.”
Las principales condenas partieron del Congreso Judío Europeo, que por medio de su presidente Moshé Kantor exigió excusas y una retractación afirmando que tales declaraciones forman parte de “una tendencia peligrosa de provocación en contra de los judíos y de Israel en Europa, que debe ser erradicada inmediatamente.”
Algunos periodistas han criticado sin tardar las declaraciones del responsable europeo tildándolas de “racistas”. Por su parte, el portavoz del Ejecutivo buscó tomar distancia: “Se trata de declaraciones de tipo personal, que no representan la opinión bien conocida de la Comisión o del Consejo sobre el proceso de paz en Oriente Medio,” señaló Olivier Bailly.
En respuesta a las exigencias del Consejo judío, De Gucht aseguró que no había querido ofender a la comunidad judía y negó ser antisemita: “Quiero decir claramente que el antisemitismo no tiene lugar en el mundo de hoy y se opone de manera fundamental a nuestros valores europeos,” subrayó.
“No debemos subestimar la opinión del judío medio fuera de Israel,” en el que existe la “creencia de tener razón”, dijo De Gucht. “No es fácil tener una conversación racional ni siquiera con un judío moderado.”
Las principales condenas partieron del Congreso Judío Europeo, que por medio de su presidente Moshé Kantor exigió excusas y una retractación afirmando que tales declaraciones forman parte de “una tendencia peligrosa de provocación en contra de los judíos y de Israel en Europa, que debe ser erradicada inmediatamente.”
Algunos periodistas han criticado sin tardar las declaraciones del responsable europeo tildándolas de “racistas”. Por su parte, el portavoz del Ejecutivo buscó tomar distancia: “Se trata de declaraciones de tipo personal, que no representan la opinión bien conocida de la Comisión o del Consejo sobre el proceso de paz en Oriente Medio,” señaló Olivier Bailly.
En respuesta a las exigencias del Consejo judío, De Gucht aseguró que no había querido ofender a la comunidad judía y negó ser antisemita: “Quiero decir claramente que el antisemitismo no tiene lugar en el mundo de hoy y se opone de manera fundamental a nuestros valores europeos,” subrayó.
