Turki Al Faisal-a la izquierda-le da la mano al ministro israelí de defensa Moshe Yaalon, durante la última cumbre de Davos
"Usted nos acusa de fomentar conflictos religiosos en Siria, Yemen e Irak", escribe el príncipe Turki al Faysal, director de los servicios de inteligencia de su país durante 20 años en un artículo publicado en la prensa saudí.
"Y al insulto añade la ofensa pidiéndonos que nos pongamos de acuerdo con Irán, un país que usted mismo describe como partidario del terrorismo y a pesar de haber prometido a nuestro rey luchar contra estas actividades de desestabilización" en Oriente Medio, añade.
En unas declaraciones publicadas por la revista estadounidense The Atlantic, Obama reprocha a Arabia Saudí la propagación a otros países musulmanes, entre ellos Indonesia, de su ideología radical wahabí y pide que "comparta" su presencia en Oriente Medio con Irán, su rival regional.
Arabia Saudí (sunita) acusa a Irán (chiita) de injerencia en los conflictos árabes, principalmente en los de Siria, Yemen, Líbano, Irak y Baréin.
"Y al insulto añade la ofensa pidiéndonos que nos pongamos de acuerdo con Irán, un país que usted mismo describe como partidario del terrorismo y a pesar de haber prometido a nuestro rey luchar contra estas actividades de desestabilización" en Oriente Medio, añade.
En unas declaraciones publicadas por la revista estadounidense The Atlantic, Obama reprocha a Arabia Saudí la propagación a otros países musulmanes, entre ellos Indonesia, de su ideología radical wahabí y pide que "comparta" su presencia en Oriente Medio con Irán, su rival regional.
Arabia Saudí (sunita) acusa a Irán (chiita) de injerencia en los conflictos árabes, principalmente en los de Siria, Yemen, Líbano, Irak y Baréin.