Más de 1.000 personas se habían reunido en calma durante 90 minutos ante la alcaldía de Baltimore, para reclamar justicia por Freddie Gray, de 25 años, muerto a raíz de la fractura de vértebras cercivales una semana después de haber sido detenido el 12 de abril en un barrio popular de esta ciudad de 620.000 habitantes.
El ambiente se deterioró súbitamente cuando varias decenas de manifestantes se dirigieron al estadio de béisbol Camden Yards, una hora antes del inicio de un partido Baltimore Orioles-Boston Red Sox.
Imágenes filmadas por las cadenas de televisión locales desde helicópteros mostraban a jóvenes lanzando botellas de refrescos y latas contra policías frente al museo de las leyendas deportivas.
"Los manifestantes están ahora destruyendo ventanas y nos lanzan objetos", confirmó la Policía de Baltimore en Twitter. "Pedimos a todos que mantengan la calma", agregó.
También se vio a manifestantes saqueando un supermercado, rompiendo vitrinas y bloqueando calles. Una piedra atravesó el vidrio de un vehículo, informó la cadena WBAL.
Un fotógrafo de la AFP contempló la destrucción de los vidrios de tres coches policiales antes de que intervinieran fuerzas antidisturbios.
El capitán de la Policía de Baltimore Eric Kowalczyk dijo a WBAL que dos personas habían sido detenidas.