Una obra de Le Corbusier
La muestra "Le Corbusier, un atlas de los paisajes modernos" incluye unas 320 obras, dibujos, maquetas, fotos y proyectos, así como telas y acuarelas de este visionario de carácter difícil, que soñaba con ser reconocido como pintor.
El mundo de Le Corbusier "merece ser redescubierto de otro modo", a partir de sus "calidades poéticas y artísticas", explicó a la AFP el profesor de arquitectura de la Universidad de Nueva York, Jean-Louis Cohen, uno de los dos curadores de la exposición.
"Es Le Corbusier observando el paisaje, fabricando paisajes. Se ha considerado que era un arquitecto que despreciaba las ciudades, que quería reducir todo según su punto de vista, que es el padre de los grandes conjuntos, lo que es ampliamente falso", agregó.
Sus construcciones no eran solo "máquinas para vivir", según la propia expresión de Le Corbusier, sino también "máquinas para mirar el paisaje", señaló Cohen.
La exposición se desarrolla de manera cronológica y geográfica: desde el Jura suizo donde Charles-Édouard Jeanneret-Gris (tal el verdadero nombre de Le Corbusier) nació el 6 de octubre de 1887, hasta el sur de Francia donde murió el 27 de agosto de 1965.
En el medio, la muestra pasa por París, Italia, Austria, Alemania, Estambul, Grecia, Buenos Aires, Rio de Janeiro, Moscú, Argelia e India.
En lo arquitectónico, va desde la más íntima de sus construcciones hasta sus más grandes proyectos de urbanismo, como la creación de la ciudad india de Chandigarh.
Se han reconstituido cuatro interiores, entre ellos su chalé de Roquebrune-Cap-Martin (sur de Francia) y una habitación de la "Casa Blanca" construida para sus padres en La-Chaux-de Fonds, su ciudad natal.
La muestra permite observar la evolución y la constancia del "arquitecto más grande del siglo XX", el "primero" en haber recorrido el mundo de tal manera, según Jean-Louis Cohen.
Algunos de sus 400 proyectos -de los cuales varias maquetas son expuestas en el MoMA- nunca vieron la luz, generando a veces grandes frustraciones para Le Corbusier.
De todos modos, el arquitecto dejó unas 75 construcciones en una docena de países.
Su relación con Estados Unidos y el MoMA en particular estuvo marcada durante años por "los proyectos fallidos y los malentendidos" y "mucha aspereza de parte de Le Corbusier".
En 1953, cuando el MoMA quiso organizar una gran exposición de su obra, las exigencias del arquitecto fueron tales que el proyecto quedó en la nada tras tres años de negociaciones.
"Quería controlar todo", explicó Cohen, subrayando también el alto caché exigido por Le Corbusier.
La retrospectiva se abrirá finalmente 60 años después de aquel proyecto inconcluso.
La Fundación Le Corbusier de París prestó varias obras. Otras vienen del Fondo Le Corbusier de La Chaux-de-Fonds y algunas de la propia colección del MoMA.
La exposición continuará en España, en Barcelona del 6 al 11 de mayo de 2014, y en Madrid del 11 de junio al 19 de octubre.
El mundo de Le Corbusier "merece ser redescubierto de otro modo", a partir de sus "calidades poéticas y artísticas", explicó a la AFP el profesor de arquitectura de la Universidad de Nueva York, Jean-Louis Cohen, uno de los dos curadores de la exposición.
"Es Le Corbusier observando el paisaje, fabricando paisajes. Se ha considerado que era un arquitecto que despreciaba las ciudades, que quería reducir todo según su punto de vista, que es el padre de los grandes conjuntos, lo que es ampliamente falso", agregó.
Sus construcciones no eran solo "máquinas para vivir", según la propia expresión de Le Corbusier, sino también "máquinas para mirar el paisaje", señaló Cohen.
La exposición se desarrolla de manera cronológica y geográfica: desde el Jura suizo donde Charles-Édouard Jeanneret-Gris (tal el verdadero nombre de Le Corbusier) nació el 6 de octubre de 1887, hasta el sur de Francia donde murió el 27 de agosto de 1965.
En el medio, la muestra pasa por París, Italia, Austria, Alemania, Estambul, Grecia, Buenos Aires, Rio de Janeiro, Moscú, Argelia e India.
En lo arquitectónico, va desde la más íntima de sus construcciones hasta sus más grandes proyectos de urbanismo, como la creación de la ciudad india de Chandigarh.
Se han reconstituido cuatro interiores, entre ellos su chalé de Roquebrune-Cap-Martin (sur de Francia) y una habitación de la "Casa Blanca" construida para sus padres en La-Chaux-de Fonds, su ciudad natal.
La muestra permite observar la evolución y la constancia del "arquitecto más grande del siglo XX", el "primero" en haber recorrido el mundo de tal manera, según Jean-Louis Cohen.
Algunos de sus 400 proyectos -de los cuales varias maquetas son expuestas en el MoMA- nunca vieron la luz, generando a veces grandes frustraciones para Le Corbusier.
De todos modos, el arquitecto dejó unas 75 construcciones en una docena de países.
Su relación con Estados Unidos y el MoMA en particular estuvo marcada durante años por "los proyectos fallidos y los malentendidos" y "mucha aspereza de parte de Le Corbusier".
En 1953, cuando el MoMA quiso organizar una gran exposición de su obra, las exigencias del arquitecto fueron tales que el proyecto quedó en la nada tras tres años de negociaciones.
"Quería controlar todo", explicó Cohen, subrayando también el alto caché exigido por Le Corbusier.
La retrospectiva se abrirá finalmente 60 años después de aquel proyecto inconcluso.
La Fundación Le Corbusier de París prestó varias obras. Otras vienen del Fondo Le Corbusier de La Chaux-de-Fonds y algunas de la propia colección del MoMA.
La exposición continuará en España, en Barcelona del 6 al 11 de mayo de 2014, y en Madrid del 11 de junio al 19 de octubre.