Francisco de Miranda
En una Caracas que apenas se extendía hasta unas pocas cuadras alrededor de la Plaza Mayor, la difusión de esta noticia fue veloz. Aún sin los instrumentos tecnológicos con los que se cuentan en la actualidad, el pueblo se enteró oportunamente del acontecimiento.
“Había en el Congreso, entre la gente que asistía a las sesiones, un personaje a quien le decían el pueblo, cada vez que había un discurso enérgico gritaba: "Viva la libertad, viva la independencia", era un esquina caliente”, expresó el historiador Luis Pellicer.
Para Pellicer, quien además dirige el Archivo General de la Nación, el boca a boca fue una de los instrumentos que movió la noticia por toda la ciudad:
“Se activó radio bemba, porque no era muy difícil que se expandiera la noticia: la ciudad era pequeña, y había pocos habitantes en Venezuela".
No obstante, fue el martes 9 de julio de 1811 en la Gazeta de Caracas número 40 cuando la información fue oficializada en el órgano divulgativo de la causa patriótica, en ese momento, donde el título Independencia de Venezuela encabezó la primera página.
“Llegó por fin el día en que Venezuela debía fixar para siempre sus destinos y el cinco de julio tendrá el lugar más señalado en las páginas de su historia. El será para lo venidero la epoca de nuestra libertad que no estaba segura sin el apoyo de nuestra absoluta libertad (sic)”, decía la Gazeta de Caracas.
Pero la Gazeta tenía un precio, y pocos podían comprarla, además la mayoría de los habitantes eran analfabetos, no obstante, la información escrita también llegaba más allá de los círculos “elitescos e ilustrados”.
“Dentro de la élite de la sociedad siempre ha existido gente revolucionaria. En las pulperías se reunía la gente a leer la prensa, alguien leía en voz alta y los demás se enteraban de lo que estaba pasando”, explicó el historiador.
Seguramente dentro de alguna pulpería de la ciudad alguna persona leía a otras: “Seríamos nosotros los más criminales, y dignos de execración de la posteridad, si después de trecientos años de dura opresión nos contentásemos con una libertad expuesta á sucumbir otra vez baxo el imperio de un Monarca Europeo...”, como se escribió en la Gazeta de Caracas.
Las informaciones de la independencia siguieron protagonizando las páginas de este periódico venezolano en los días siguientes a la declaración de la independencia, y se reflejan los reconocimientos a la independencia de Cumaná, del Tocuyo, Mérida y otras regiones.
16 de Julio: “Al amanecer de ese día se vio fluctuar el nuevo pabellón nacional”. 19 de julio: “Americanos, ha llegado el momento de hablar verdades claras: vosotros no podeis resivir á Fernando, ó a cualquier otro candidato real, sin firmar el decreto de muerte de la libertad Americana”. 23 de Julio: “La pronta declaración de la Independencia del Sur América, producirá también mejores efectos con respecto á las naciones extrageras”.
“A través de la prensa se aupó todo el clima independentista y revolucionario. La revolución está sucediendo en América Latina simultáneamente, en todas partes hay realistas y patriotas, pero están venciendo patriotas y republicanos”, dijo Pellicer.
Mientras en Venezuela se leía que en México ha habido “una acción muy reñida entre las tropas del Gobierno y los Revolucionarios, en la cual las primeras quedaron derrotadas con una perdida considerable”, también en México se sabía de la independencia venezolana.
A Venezuela llega información de Ecuador, de Perú, del Alto Perú, de Argentina, y viceversa. “La Revolución se está dando en toda la América dominada por España”, manifestó el historiador.
“Había en el Congreso, entre la gente que asistía a las sesiones, un personaje a quien le decían el pueblo, cada vez que había un discurso enérgico gritaba: "Viva la libertad, viva la independencia", era un esquina caliente”, expresó el historiador Luis Pellicer.
Para Pellicer, quien además dirige el Archivo General de la Nación, el boca a boca fue una de los instrumentos que movió la noticia por toda la ciudad:
“Se activó radio bemba, porque no era muy difícil que se expandiera la noticia: la ciudad era pequeña, y había pocos habitantes en Venezuela".
No obstante, fue el martes 9 de julio de 1811 en la Gazeta de Caracas número 40 cuando la información fue oficializada en el órgano divulgativo de la causa patriótica, en ese momento, donde el título Independencia de Venezuela encabezó la primera página.
“Llegó por fin el día en que Venezuela debía fixar para siempre sus destinos y el cinco de julio tendrá el lugar más señalado en las páginas de su historia. El será para lo venidero la epoca de nuestra libertad que no estaba segura sin el apoyo de nuestra absoluta libertad (sic)”, decía la Gazeta de Caracas.
Pero la Gazeta tenía un precio, y pocos podían comprarla, además la mayoría de los habitantes eran analfabetos, no obstante, la información escrita también llegaba más allá de los círculos “elitescos e ilustrados”.
“Dentro de la élite de la sociedad siempre ha existido gente revolucionaria. En las pulperías se reunía la gente a leer la prensa, alguien leía en voz alta y los demás se enteraban de lo que estaba pasando”, explicó el historiador.
Seguramente dentro de alguna pulpería de la ciudad alguna persona leía a otras: “Seríamos nosotros los más criminales, y dignos de execración de la posteridad, si después de trecientos años de dura opresión nos contentásemos con una libertad expuesta á sucumbir otra vez baxo el imperio de un Monarca Europeo...”, como se escribió en la Gazeta de Caracas.
Las informaciones de la independencia siguieron protagonizando las páginas de este periódico venezolano en los días siguientes a la declaración de la independencia, y se reflejan los reconocimientos a la independencia de Cumaná, del Tocuyo, Mérida y otras regiones.
16 de Julio: “Al amanecer de ese día se vio fluctuar el nuevo pabellón nacional”. 19 de julio: “Americanos, ha llegado el momento de hablar verdades claras: vosotros no podeis resivir á Fernando, ó a cualquier otro candidato real, sin firmar el decreto de muerte de la libertad Americana”. 23 de Julio: “La pronta declaración de la Independencia del Sur América, producirá también mejores efectos con respecto á las naciones extrageras”.
“A través de la prensa se aupó todo el clima independentista y revolucionario. La revolución está sucediendo en América Latina simultáneamente, en todas partes hay realistas y patriotas, pero están venciendo patriotas y republicanos”, dijo Pellicer.
Mientras en Venezuela se leía que en México ha habido “una acción muy reñida entre las tropas del Gobierno y los Revolucionarios, en la cual las primeras quedaron derrotadas con una perdida considerable”, también en México se sabía de la independencia venezolana.
A Venezuela llega información de Ecuador, de Perú, del Alto Perú, de Argentina, y viceversa. “La Revolución se está dando en toda la América dominada por España”, manifestó el historiador.