Los militares, con el apoyo de bulldozers y tanques, tomaron posición en el barrio de Bab al Tebbané tras haberse desplegado el martes en el barrio vecino alauita de Jabal Mohsen.
La rivalidad entre los dos barrios se agravó desde que empezó hace tres años el conflicto en Siria. Los habitantes de Bab al Tebanné son partidarios de la rebelión, mayoritariamente sunita, mientras que los de Jabal Mohsen son favorables a Bashar Al Asad, de religión alauita.
Tras ocupar el terreno, los soldados llevaron a cabo registros pero no arrestaron a nadie porque los jefes de las bandas rivales armadas habían huido, indicó una fuente de seguridad.
El gobierno pidió al ejército que "ponga en marcha un plan para controlar la situación" en Trípoli, donde en las últimas dos semanas de marzo murieron 30 personas.
Por otra parte tres cohetes lanzados desde Siria cayeron sin causar víctimas en Labwé, un feudo del movimiento chiita Hezbolá en el este de Líbano, indicó a la AFP una fuente de seguridad.
La participación del Hezbolá en la guerra en Siria junto al régimen de Asad ha exacerbado las tensiones religiosas en Líbano, donde los sunitas apoyan a la rebelión y los chiitas son mayoritariamente partidarios del régimen.