
"Mursi dio el apoyo de Egipto a los palestinos en Gaza, lo que confirma el advenimiento de una nueva era entre Egipto y la causa palestina", declaró Mishal.
"Vamos a obrar en pos de la reconciliación palestina", prometió el presidente egicio poco después de su elección en mayo, en referencia a los esfuerzos para acercar a Hamas y al Fatah del presidente Abas.
Estos esfuerzos, que ya realizaba el régimen de Hosni Mubarak, depuesto en febrero de 2011 por presión popular, prosiguen bajo el poder de transición instaurado por el ejército egipcio.
La victoria electoral de Mursi fue celebrada por Hamas en Gaza.
Mursi debe organizar un encuentro entre Mishal y Abas para favorecer la reconciliación, según el jefe de Hamas.
Egipto reabrió en mayo de 2011, tras la salida del presidente Mubarak, la terminal de Rafah, único punto de paso entre la franja de Gaza, sometido a un bloqueo israelí, y el mundo exterior no controlado por Irael. Aunque sólo permite el paso de algunas personas, lo que se denomina "casos humanitarios", enfermos, pacientes que necesitan ser operados, etc. Para la gente normal, y para las mercancías la frontera sigue cerrada.