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Ernesto Cardenal
"Este es el último poema que he escrito sobre el cosmos, el universo y la inspiración que yo tengo ahora", dijo ante una nube de fotógrafos y la ovación de más de un centenar de poetas y novelistas asistentes al XIV Festival Internacional de Poesía en Granada, al sureste de Managua.
Cardenal (20 de enero de 1925) presentó su libro la noche (local) del martes, acompañado por la poeta nicaragüense Gioconda Belli y el editor alemán Herman Schultz, quien hace más de 40 años dio a conocer su obra poética en Europa.
"Parece que el universo/ tuvo un propósito/ en el que estamos nosotros/ el universo/ consciente de sí mismo", proclamó el religioso al abrir el encuentro con la lectura del extenso poema que corona la obra, publicada bajo el sello local Anamá Ediciones.
"Todos los seres vivos/ fuimos uno solo en el big-bang/ y añoramos esa unión", agregó citando el verso como un rezo ante el altar, para lamentarse de la injusticia y la desigualdad social que –dijo- impera en el planeta "desde el Neolítico".
La presentación de la obra atrapó la atención de los más de 130 poetas del mundo asistentes al XIV Festival Internacional, que inició el pasado 11 de febrero y concluye el 17, y se considera una continuación del poemario "Cántico Cósmico", con el cual Cardenal sorprendió a sus lectores en 1989.
"Creo que soy el único poeta que se inspira en la ciencia y escribe poemas científicos sobre el universo", comentó con una sonrisa, enfundado en su tradicional cotona (camisa campesina) blanca, jeans y boina negra sobre el cabello cano.
Durante la presentación, Ernesto Cardenal agradeció a Herman Schultz, quien de 1967 a 2011 dirigió la conocida editorial alemana Peter Hammer Verlag, y de quien dijo "hizo que fuera conocida nuestra revolución y nuestra poesía en el mundo".
"Gracias a él Alemania tuvo 152 comités de solidaridad con Nicaragua", agregó el poeta al recordar la revolución sandinista en la década de 1980, durante la cual participó activamente como ministro de Cultura.
También Gioconda Belli, vicepresidenta del Festival Internacional de Poesía, exaltó el trabajo de Schultz en la difusión de la obra de Cardenal y de otros autores nicaragüenses traducidos y publicados profusamente en Alemania, como Sergio Ramírez (Premio Cervantes 2017) y ella misma.
Autor de obras como "Epigramas" y "Vida Perdida", Ernesto Cardenal fue un símbolo de la revolución nicaragüense desde que en la década de 1970 fundó en la isla de Solentiname (sur) una comunidad de pintores y poetas guerrilleros que enfrentaron al dictador Anastasio Somoza.
En los últimos 20 años, el sacerdote se mantuvo alejado del partido Frente Sandinista, que perdió las elecciones en 1990 pero retornó al poder en 2007, porque considera que se ha instaurado una “dictadura” en Nicaragua.
Tras sus críticas al Gobierno de Daniel Ortega, Cardenal fue sometido en años recientes a varios juicios en los tribunales de Nicaragua por presuntos litigios de propiedad, acciones que el poeta calificó como "acoso y persecución".
Cardenal (20 de enero de 1925) presentó su libro la noche (local) del martes, acompañado por la poeta nicaragüense Gioconda Belli y el editor alemán Herman Schultz, quien hace más de 40 años dio a conocer su obra poética en Europa.
"Parece que el universo/ tuvo un propósito/ en el que estamos nosotros/ el universo/ consciente de sí mismo", proclamó el religioso al abrir el encuentro con la lectura del extenso poema que corona la obra, publicada bajo el sello local Anamá Ediciones.
"Todos los seres vivos/ fuimos uno solo en el big-bang/ y añoramos esa unión", agregó citando el verso como un rezo ante el altar, para lamentarse de la injusticia y la desigualdad social que –dijo- impera en el planeta "desde el Neolítico".
La presentación de la obra atrapó la atención de los más de 130 poetas del mundo asistentes al XIV Festival Internacional, que inició el pasado 11 de febrero y concluye el 17, y se considera una continuación del poemario "Cántico Cósmico", con el cual Cardenal sorprendió a sus lectores en 1989.
"Creo que soy el único poeta que se inspira en la ciencia y escribe poemas científicos sobre el universo", comentó con una sonrisa, enfundado en su tradicional cotona (camisa campesina) blanca, jeans y boina negra sobre el cabello cano.
Durante la presentación, Ernesto Cardenal agradeció a Herman Schultz, quien de 1967 a 2011 dirigió la conocida editorial alemana Peter Hammer Verlag, y de quien dijo "hizo que fuera conocida nuestra revolución y nuestra poesía en el mundo".
"Gracias a él Alemania tuvo 152 comités de solidaridad con Nicaragua", agregó el poeta al recordar la revolución sandinista en la década de 1980, durante la cual participó activamente como ministro de Cultura.
También Gioconda Belli, vicepresidenta del Festival Internacional de Poesía, exaltó el trabajo de Schultz en la difusión de la obra de Cardenal y de otros autores nicaragüenses traducidos y publicados profusamente en Alemania, como Sergio Ramírez (Premio Cervantes 2017) y ella misma.
Autor de obras como "Epigramas" y "Vida Perdida", Ernesto Cardenal fue un símbolo de la revolución nicaragüense desde que en la década de 1970 fundó en la isla de Solentiname (sur) una comunidad de pintores y poetas guerrilleros que enfrentaron al dictador Anastasio Somoza.
En los últimos 20 años, el sacerdote se mantuvo alejado del partido Frente Sandinista, que perdió las elecciones en 1990 pero retornó al poder en 2007, porque considera que se ha instaurado una “dictadura” en Nicaragua.
Tras sus críticas al Gobierno de Daniel Ortega, Cardenal fue sometido en años recientes a varios juicios en los tribunales de Nicaragua por presuntos litigios de propiedad, acciones que el poeta calificó como "acoso y persecución".
