"La Eurozona ha demostrado ser vulnerable a las perturbaciones económicas 'porque no hay mecanismos de absorción eficaces'", explicó esta fuente, citando fragmentos de la propuesta desvelada por el diario español El País.
"La disparidad entre los Estados miembros se 'corrigió en altas tasas de paro en los países más afectados por la crisis'", agregó, en pleno proceso de reflexión sobre el futuro de la zona euro, que la Comisión espera plasmar en un libro blanco a finales de mes.
El flamante presidente francés, Emmanuel Macron, ya mostró antes de asumir el cargo su apuesta por la creación de un ministro de Finanzas y de un presupuesto para la zona euro, así como de un parlamento para este bloque monetario.
En sus propuestas, Madrid se muestra también a favor de una "capacidad fiscal común como instrumento de estabilización", que podría consistir en un instrumento para inversiones y contar, más adelante, con un seguro de desempleo complementario al nacional, según esta fuente.
En una línea más próxima a la de Alemania, partidaria del rigor fiscal, España matiza que ese presupuesto común se "debe complementar con una estricta aplicación de las reglas de estabilidad" que rigen en el bloque.
España aboga además, en el terreno fiscal y "a largo plazo", por un "cierto grado de mutualización de la deuda" a través de una gestión conjunta en los 19 países del euro.
Pero esta idea de crear una suerte de Eurobonos no convence a Alemania, la primera economía de la zona euro, visto el elevado endeudamiento público en países como Italia, Portugal o España, que se vieron más afectados por la crisis financiera mundial de 2008 y la posterior crisis de la deuda.
En Berlín, Macron mostró este lunes ante la canciller alemana, Angela Merkel, su rechazo a una "mutualización de las deudas del pasado", si bien se dijo partidario de abrir un debate sobre "nuevos mecanismos de inversiones para el futuro".
El acceso a los instrumentos de una unión fiscal planteados por España estarían condicionados, no obstante, "al cumplimiento de criterios de convergencia real" para reducir los riegos, explicó esta fuente.
En su propuesta, Madrid, que quiere también acabar de completar la unión bancaria, aboga así por "reforzar y controlar la implementación de reformas estructurales" en los países de la zona euro en el marco del denominado semestre europeo.