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Política
En el marco de un paro nacional convocado por la Alianza de Oposición contra la Dictadura los manifestantes tomaron varias carreteras, según las imágenes mostradas por la televisión.
Zelaya apareció por la mañana liderando a un nutrido grupo de personas en una carretera cerca de la capital, Tegucigalpa. "Vamos a estar todo el día en las calles hasta que se reconozca el derecho de que Salvador ganó las elecciones", dijo a medios locales en alusión al candidato de la Alianza de Oposición, Salvador Nasralla, quien denunció que le hicieron fraude para robarle las elecciones.
Según el resultado definitivo de las elecciones, publicado por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) después de revisar miles de actas electorales impugnadas por la oposición, Hernández obtuvo el 42,98 por ciento del total de votos y Nasralla el 41,38 por ciento.
Sin embargo, hasta la fecha el TSE no ha declarado a ningún candidato vencedor de los comicios porque todavía se encuentra resolviendo 150 impugnaciones más.
Zelaya, el principal aliado de Nasralla, fue derrocado en un golpe de Estado militar el 28 de junio de 2009 por sus intentos de cambiar las leyes para poder aspirar a la reelección, en un proceso similar al llevado a cabo por el actual presidente.
Después de esa crisis política, Zelaya fundó el Partido de izquierda Libertad y Refundación (Libre), que junto al centrista Partido Innovación y Unidad (Pinu) conforma la Alianza de Oposición contra la Dictadura que postuló a Nasralla, de 64 años.
Las protestas comenzaron moderadas, debido a la presencia militar en los diferentes puntos que los huelguistas tenían previsto tomar, pero a medida que avanzaba el día tomaron más fuerza.
Más temprano, pequeños grupos de personas pretendieron cerrar por completo algunos accesos por carretera, en los que quemaron llantas y colocaron otros obstáculos, pero fueron apartados por los agentes del orden que los obligaron a protestar a orillas de calles.
El diputado del opositor Partido Libertad y Refundación (Libre), Rafael Alegría, quien se encontraba en la salida de la capital hacia el oriente del país, criticó en declaraciones a la televisión que los militares no los dejaban manifestarse, pese a que es un derecho que tienen como ciudadanos.
“Nos han dicho que no nos tomemos la calle completamente, entonces vamos a cerrar solo una vía, porque la calle es pública, no es privada, y a nosotros nos asiste el derecho a protestar”, expresó.
Zelaya apareció por la mañana liderando a un nutrido grupo de personas en una carretera cerca de la capital, Tegucigalpa. "Vamos a estar todo el día en las calles hasta que se reconozca el derecho de que Salvador ganó las elecciones", dijo a medios locales en alusión al candidato de la Alianza de Oposición, Salvador Nasralla, quien denunció que le hicieron fraude para robarle las elecciones.
Según el resultado definitivo de las elecciones, publicado por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) después de revisar miles de actas electorales impugnadas por la oposición, Hernández obtuvo el 42,98 por ciento del total de votos y Nasralla el 41,38 por ciento.
Sin embargo, hasta la fecha el TSE no ha declarado a ningún candidato vencedor de los comicios porque todavía se encuentra resolviendo 150 impugnaciones más.
Zelaya, el principal aliado de Nasralla, fue derrocado en un golpe de Estado militar el 28 de junio de 2009 por sus intentos de cambiar las leyes para poder aspirar a la reelección, en un proceso similar al llevado a cabo por el actual presidente.
Después de esa crisis política, Zelaya fundó el Partido de izquierda Libertad y Refundación (Libre), que junto al centrista Partido Innovación y Unidad (Pinu) conforma la Alianza de Oposición contra la Dictadura que postuló a Nasralla, de 64 años.
Las protestas comenzaron moderadas, debido a la presencia militar en los diferentes puntos que los huelguistas tenían previsto tomar, pero a medida que avanzaba el día tomaron más fuerza.
Más temprano, pequeños grupos de personas pretendieron cerrar por completo algunos accesos por carretera, en los que quemaron llantas y colocaron otros obstáculos, pero fueron apartados por los agentes del orden que los obligaron a protestar a orillas de calles.
El diputado del opositor Partido Libertad y Refundación (Libre), Rafael Alegría, quien se encontraba en la salida de la capital hacia el oriente del país, criticó en declaraciones a la televisión que los militares no los dejaban manifestarse, pese a que es un derecho que tienen como ciudadanos.
“Nos han dicho que no nos tomemos la calle completamente, entonces vamos a cerrar solo una vía, porque la calle es pública, no es privada, y a nosotros nos asiste el derecho a protestar”, expresó.
