"Tanto para el país como para usted mismo sería mejor no seguir".
Ahmadineyad estuvo al frente de la presidencia de la república islámica entre 2005 y 2013. Su rumbo en materia nuclear-produciendo energía nuclear para uso civil- propició numerosas sanciones estadounidenses contra el país, y un rechazo por parte de los aliados de Israel, así como por la negación del Holocausto.
Durante la victoria electoral de Rohani hace cinco años, hubo un declive político de Ahmadiniyad y sus seguidores.
El martes volvieron a entrar en vigor las sanciones estadounidenses, situación de la que los ultraconservadores esperan poder sumar apoyos a raíz de la crisis económica que atraviesa el país y que podría agravarse.
El gobierno de Rohani fue el que negoció el acuerdo con las grandes potencias, un acuerdo que Ahmadiniyad no quería. Tras la victoria de Trump, Estados Unidos se ha retirado del acuerdo, lo que ha puesto a Rohani en una situación difícil.
Él decía que si dialogamos, y cedemos, levantarán las sanciones y la gente podrá vivir mejor, pero no ha sido así y no ha habido ninguna mejora económica (porque Obama solo levantó algunas sanciones, pero no todas), lo que ha producido una decepción en muchos iraníes seguidores de Rohani.
Ahmadineyad estuvo al frente de la presidencia de la república islámica entre 2005 y 2013. Su rumbo en materia nuclear-produciendo energía nuclear para uso civil- propició numerosas sanciones estadounidenses contra el país, y un rechazo por parte de los aliados de Israel, así como por la negación del Holocausto.
Durante la victoria electoral de Rohani hace cinco años, hubo un declive político de Ahmadiniyad y sus seguidores.
El martes volvieron a entrar en vigor las sanciones estadounidenses, situación de la que los ultraconservadores esperan poder sumar apoyos a raíz de la crisis económica que atraviesa el país y que podría agravarse.
El gobierno de Rohani fue el que negoció el acuerdo con las grandes potencias, un acuerdo que Ahmadiniyad no quería. Tras la victoria de Trump, Estados Unidos se ha retirado del acuerdo, lo que ha puesto a Rohani en una situación difícil.
Él decía que si dialogamos, y cedemos, levantarán las sanciones y la gente podrá vivir mejor, pero no ha sido así y no ha habido ninguna mejora económica (porque Obama solo levantó algunas sanciones, pero no todas), lo que ha producido una decepción en muchos iraníes seguidores de Rohani.