El Arzobispado de Tarragona ha anunciado mediante un comunicado que ya ha iniciado una investigación por la denuncia de abusos sexuales de un antiguo alumno del Seminario de los Padres Mercedarios de Reus y anima a las víctimas a denunciar ante "las autoridades civiles". El Arzobispado "lamenta profundamente que se hayan producido o se produzcan casos de este tipo" y expresa la "absoluta repulsa" y "tolerancia cero" de la Iglesia ante estos casos.
La denuncia del exalumno ya se ha trasladado a los superiores de los Padres Mercedarios "para que actúen conforme a los procedimientos establecidos por la Iglesia para estos casos". También han informado a la Congregación para la Doctrina de la Fe de la Santa Sede y animan a las personas afectadas por estos casos a ponerlos en "conocimiento de las autoridades civiles, con las que la Iglesia colaborará plenamente en la exigencia de responsabilidades".
El caso se ha dado a conocer este viernes al publicar el Diari de Tarragona el relato de Sergi, de 45 años, que ha denunciado ahora haber sufrido abusos sexuales cuando tenía 11 años y estaba interno en el Seminario Mercedario de Reus. El antiguo seminarista se ha decidido a desvelar su historia, pasados 34 años, "para quitarme un peso que he llevado encima durante demasiado tiempo", animado por la investigación policial y las detenciones de los presuntos autores de abusos en Granada.
El Seminario de Reus estuvo activo entre 1941 y 1995, hasta que fue derruido en 2007 y Sergi ingresó como interno en 1982 por circunstancias familiares. Su estancia era plácida hasta que cogió la gripe y le llevaron a la enfermería donde, según su denuncia, un padre llamado Javier le sometió a abusos. Su estancia se prolongó tres años más, en los que se desataron los rumores y hechos como la expulsión de dos hermanos del centro, "porque uno de ellos aseguraba haber sufrido abusos de un sacerdote", relata Sergi.