El salón internacional del turismo, en Madrid.
En tanto, Siria y Libia renunciaron a participar en la 32ª edición de este salón, que durará en Madrid hasta el domingo.
Pero otros países que sufrieron también una actualidad perturbada no se ausentaron de la primera cita del año del sector, que espera unos 200.000 visitantes, entre profesionales y público.
"Nosotros partimos de cero, entonces todo lo que está por encima ya es un éxito para nosotros", sostiene Leila Tekaia, representante en España de la oficina de turismo tunecino.
Según datos publicados el lunes en Madrid por la Organización mundial del turismo (OMT), mientras la llegada de turistas subió 4,4% en el mundo en 2011, en el norte de Africa cayó un 12%. Medio Oriente perdió 5 millones de visitantes (-8%).
En Túnez, donde este sector representa tradicionalmente el 6,5% del PIB y 350.000 empleos, "hemos perdido el 30 a 40% de turistas", confía Leila Tekaia, entre los cuales "el mercado español es el que nos ha dado mas dificultades, con una caída del 60%" del número de visitantes, que se habrán lanzado en masa hacia las Islas Canarias y Turquía.
La misma tendencia se registra en Egipto que, según cifras oficiales, recibió un tercio menos de turistas.
Gihan Hamed, directora de operaciones de la agencia Galaxia Tours, especializada en esos países, da un testimonio más sombrío aún: "hemos perdido el 90% de nuestro trabajo y hemos despedido al 40% de nuestra plantilla", relató.
Japón también registra caída de presencias turistas pero por razones diferentes. Al haber sufrido a la vez un sismo, un tsunami y una catástrofe nuclear, vio cómo caía el número de visitantes en un 29,1%, según los datos provisorios de finales de noviembre.
"Esperábamos eso, una bajada de un 30% aproximadamente, justo después del terremoto", advierte Koichi Miyazawa, director general de la Oficina de turismo japonés en Paris y subraya que el turismo aporta entre el 5 y el 7% al PIB del país.
Para atraer a nuevos visitantes, "hacemos actualmente una campaña sobre la mejor temporada en Japón, la primavera", y han previsto una reunión para finales de enero entre las oficinas de turismo del mundo entero para definir la estrategia del año, sobre todo con reducción de tarifas.
"Esperamos poder volver a los niveles del 2010 (en número de turistas), pero la realidad es muy dura", admitió.
En Egipto, según el calendario electoral previsto "para el dia 1 de julio, tendríamos un nuevo presidente, y queremos pensar que esto será la vuelta a la normalidad", declara Gilan Hamed, quien reconoce sin embargo que "esa es la teoría, después vamos a ver".
Ahora hay que convencer a los turistas para que vuelvan. "Les decimos que vivimos aquí, que nuestra vida de día a día no está afectada, que la plaza Tahrir (donde se produjeron las revueltas, ndr) es muy pequeña y El Cairo, muy grande".
"Yo vivo allí con mis dos hijos de 9 y 11 años: si ellos están seguros, esto significa que el turismo puede volver", proclama.
Túnez es la más optimista: "estamos ahora en una condiciones espectaculares, ideales", se congratula Leila Tekaia, porque "ahora ya pertenecemos al club de los países democráticos, compartimos los mismos valores de justicia, de derechos humanos, de libertad de expresión".
Ahora "nos toca la imagen: tenemos que recuperar la confianza de la gente, tenemos que tranquilizar a la gente", admite y dice que ya registra un aumento de las reservas de grupo para febrero.
Pero otros países que sufrieron también una actualidad perturbada no se ausentaron de la primera cita del año del sector, que espera unos 200.000 visitantes, entre profesionales y público.
"Nosotros partimos de cero, entonces todo lo que está por encima ya es un éxito para nosotros", sostiene Leila Tekaia, representante en España de la oficina de turismo tunecino.
Según datos publicados el lunes en Madrid por la Organización mundial del turismo (OMT), mientras la llegada de turistas subió 4,4% en el mundo en 2011, en el norte de Africa cayó un 12%. Medio Oriente perdió 5 millones de visitantes (-8%).
En Túnez, donde este sector representa tradicionalmente el 6,5% del PIB y 350.000 empleos, "hemos perdido el 30 a 40% de turistas", confía Leila Tekaia, entre los cuales "el mercado español es el que nos ha dado mas dificultades, con una caída del 60%" del número de visitantes, que se habrán lanzado en masa hacia las Islas Canarias y Turquía.
La misma tendencia se registra en Egipto que, según cifras oficiales, recibió un tercio menos de turistas.
Gihan Hamed, directora de operaciones de la agencia Galaxia Tours, especializada en esos países, da un testimonio más sombrío aún: "hemos perdido el 90% de nuestro trabajo y hemos despedido al 40% de nuestra plantilla", relató.
Japón también registra caída de presencias turistas pero por razones diferentes. Al haber sufrido a la vez un sismo, un tsunami y una catástrofe nuclear, vio cómo caía el número de visitantes en un 29,1%, según los datos provisorios de finales de noviembre.
"Esperábamos eso, una bajada de un 30% aproximadamente, justo después del terremoto", advierte Koichi Miyazawa, director general de la Oficina de turismo japonés en Paris y subraya que el turismo aporta entre el 5 y el 7% al PIB del país.
Para atraer a nuevos visitantes, "hacemos actualmente una campaña sobre la mejor temporada en Japón, la primavera", y han previsto una reunión para finales de enero entre las oficinas de turismo del mundo entero para definir la estrategia del año, sobre todo con reducción de tarifas.
"Esperamos poder volver a los niveles del 2010 (en número de turistas), pero la realidad es muy dura", admitió.
En Egipto, según el calendario electoral previsto "para el dia 1 de julio, tendríamos un nuevo presidente, y queremos pensar que esto será la vuelta a la normalidad", declara Gilan Hamed, quien reconoce sin embargo que "esa es la teoría, después vamos a ver".
Ahora hay que convencer a los turistas para que vuelvan. "Les decimos que vivimos aquí, que nuestra vida de día a día no está afectada, que la plaza Tahrir (donde se produjeron las revueltas, ndr) es muy pequeña y El Cairo, muy grande".
"Yo vivo allí con mis dos hijos de 9 y 11 años: si ellos están seguros, esto significa que el turismo puede volver", proclama.
Túnez es la más optimista: "estamos ahora en una condiciones espectaculares, ideales", se congratula Leila Tekaia, porque "ahora ya pertenecemos al club de los países democráticos, compartimos los mismos valores de justicia, de derechos humanos, de libertad de expresión".
Ahora "nos toca la imagen: tenemos que recuperar la confianza de la gente, tenemos que tranquilizar a la gente", admite y dice que ya registra un aumento de las reservas de grupo para febrero.