
Foto de Fátima
"Su hermana falleció a causa de un cáncer, pero Fátima está viva aún", indicó esta familiar, que pidió no ser identificada.
Fátima Saad, de 22 años, habría sucumbido a las torturas que le infligieron los temibles servicios de inteligencia sirios que incautaron en su casa una cámara y el teléfono celular con el que filmaba las manifestaciones hostiles al régimen, según un comunicado de la Liga Siria de Defensa de los Derechos Humanos.
Detenida a fines de junio por la Seguridad del Estado en la ciudad costera de Lataquia, y trasladada luego a varias unidades de inteligencia, la joven debió ser sometida a una operación quirúrgica en el hígado después de las torturas, informó la Liga de Derechos Humanos en un comunicado.
Fátima habría fallecido el 23 de octubre, según la Liga, que denunció "un crimen salvaje", al que calificó de "crimen contra la Humanidad", pidiendo la intervención de la justicia internacional.
Fátima Saad, de 22 años, habría sucumbido a las torturas que le infligieron los temibles servicios de inteligencia sirios que incautaron en su casa una cámara y el teléfono celular con el que filmaba las manifestaciones hostiles al régimen, según un comunicado de la Liga Siria de Defensa de los Derechos Humanos.
Detenida a fines de junio por la Seguridad del Estado en la ciudad costera de Lataquia, y trasladada luego a varias unidades de inteligencia, la joven debió ser sometida a una operación quirúrgica en el hígado después de las torturas, informó la Liga de Derechos Humanos en un comunicado.
Fátima habría fallecido el 23 de octubre, según la Liga, que denunció "un crimen salvaje", al que calificó de "crimen contra la Humanidad", pidiendo la intervención de la justicia internacional.