Shelly Yachimovich
"No nos pusimos de acuerdo. Lo lamento", declaró el lunes Tzipi Livni, que en noviembre pasado fundó el nuevo partido centrista HaTnuah (El Movimiento en hebreo), luego de abandonar la formación centrista Kadima.
"El objetivo de la reunión era encontrar una forma de remplazar al gobierno de Netanyahu. Propuse que hiciéramos una campaña común hasta las elecciones", dijo Livni, ex ministra de Relaciones Exteriores.
En las conversaciones, que duraron toda la noche del domingo, participaron Livni, la líder del Partido Laborista, Shelly Yachimovich, y el dirigente del partido centrista Yesh Atid, Yair Lapid.
Por su parte, Yachimovich dijo que la ambigüedad de Livni y Lapid con relación a una posible participación en un gobierno de unidad nacional dirigido por Netanyahu hicieron fracasar las negociaciones.
"Para que el electorado comprenda que presentamos una alternativa seria tenemos que comprometernos a no participar en un gobierno dirigido por Netanyahu", dijo Yachimovich, cuyo partido podría convertirse en la segunda fuerza del futuro parlamento.
La jefa del Partido Laborista indicó que las negociaciones podían continuar.
Según los últimos sondeos electorales, la coalición de Likud-Israel Beiteinou, que encabeza Netanyahu, obtendría entre 34 y 36 diputados sobre 120.
El bloque del conjunto de la derecha dispuesto a apoyar a Netanyahu obtendría entre 66 a 67 diputados.
En la oposición, los laboristas tendrían entre 16 a 18 escaños, HaTnuah 9-10 y Yesh Atid 9-11.
"El objetivo de la reunión era encontrar una forma de remplazar al gobierno de Netanyahu. Propuse que hiciéramos una campaña común hasta las elecciones", dijo Livni, ex ministra de Relaciones Exteriores.
En las conversaciones, que duraron toda la noche del domingo, participaron Livni, la líder del Partido Laborista, Shelly Yachimovich, y el dirigente del partido centrista Yesh Atid, Yair Lapid.
Por su parte, Yachimovich dijo que la ambigüedad de Livni y Lapid con relación a una posible participación en un gobierno de unidad nacional dirigido por Netanyahu hicieron fracasar las negociaciones.
"Para que el electorado comprenda que presentamos una alternativa seria tenemos que comprometernos a no participar en un gobierno dirigido por Netanyahu", dijo Yachimovich, cuyo partido podría convertirse en la segunda fuerza del futuro parlamento.
La jefa del Partido Laborista indicó que las negociaciones podían continuar.
Según los últimos sondeos electorales, la coalición de Likud-Israel Beiteinou, que encabeza Netanyahu, obtendría entre 34 y 36 diputados sobre 120.
El bloque del conjunto de la derecha dispuesto a apoyar a Netanyahu obtendría entre 66 a 67 diputados.
En la oposición, los laboristas tendrían entre 16 a 18 escaños, HaTnuah 9-10 y Yesh Atid 9-11.