Aitana Sánchez-Gijón
A.G. - Madrid - La elegida para protagonizar la primera obra de Estudio 1 es Aitana Sánchez-Gijón (Roma, 1968), una de las actrices españolas más conocidas, que dará vida a Leonarda, la mujer en la que se centra La viuda valenciana, la obra de Lope de Vega con la que se reinaugurará el programa. ¿Qué le gusta más de este proyecto?
Una de las cosas más atractivas es que no vaya a haber un decorado realista, como se hacía en el Estudio 1 de antes.
Hay una modernización en la propuesta: estamos en un espacio teatral donde hay elementos de época, pero no hay paredes y nos movemos un poco en espacios imaginarios para no huir de la teatralidad como concepto, sino utilizarla como algo a favor, porque si no salimos perdiendo.
¿Cómo se plantea el reto de volver a llevar el teatro a la televisión?
La obra es en verso. ¿No espantará a la audiencia?
Al principio a lo mejor cuesta un poco entender lo que se está diciendo, pero hemos hecho un trabajo con mucha conciencia para que se entienda todo lo que estamos expresando también mediante los estados de ánimo de los personajes. Así, incluso aunque no entiendas a veces exactamente lo que está diciendo el verso, sabes lo que pasa porque la emoción y las circunstancias te hacen comprenderlo.
¿Cuál es el gancho de esta historia para el espectador?
Hay varios; por ejemplo, para el que ya viene de Estudio 1 el recuperar algo que fue tan mágico; para el más nuevo, la curiosidad por ver algo inesperado que te acerca al teatro con un lenguaje de hoy. Y también la historia, una comedia inteligente y brillante donde hay un personaje femenino tan moderno; Leonarda es una mujer vestida del siglo XVI pero que en realidad es del siglo XXI, es mucho más libre que muchas mujeres que conozco y además transita por todos los estados de ánimo.
¿Le gusta hacer trabajos de época?
Sí; de hecho lo echaba de menos. No me vestía de época desde Volavérunt, una película que hice con Bigas Luna hace más de diez años. Me gusta moverme con estos trajes aunque luego acabo con el cuerpo machacado... En alguna otra vida me debí de sentir a gusto en la piel de alguna de estas señoras.
¿Cómo ha sido trabajar con Fran Perea, que hace de galán en la obra?
Fran es un actorazo con una gran preparación; además da gusto ver a un actor tan joven y tan galán, porque hay muchos actores fantásticos, pero galanes, en el sentido clásico de la palabra, no hay tantos.
Como ex presidenta de la Academia de Cine, ¿qué le parece que Pedro Almodóvar reapareciera en la última gala?
Una alegría enorme para todos; se ha hecho desear pero ya está aquí.
Una de las cosas más atractivas es que no vaya a haber un decorado realista, como se hacía en el Estudio 1 de antes.
Hay una modernización en la propuesta: estamos en un espacio teatral donde hay elementos de época, pero no hay paredes y nos movemos un poco en espacios imaginarios para no huir de la teatralidad como concepto, sino utilizarla como algo a favor, porque si no salimos perdiendo.
¿Cómo se plantea el reto de volver a llevar el teatro a la televisión?
"Hay muchos actores fantásticos, pero galanes, en el sentido clásico de la palabra, no hay tantos"
Me parece fantástico. A mí me pilló muy pequeña, pero hay generaciones enteras que se han acercado al teatro gracias a Estudio 1. Afortunadamente estamos viviendo un momento muy bueno en el teatro y la gente está llenando las salas, pero esto permite redoblar el interés hacia el teatro y descubrir textos que uno no conoce. Para los actores hacer teatro en televisión es un bombón, un regalo, porque se juntan los dos mundos, y es la manera de aunar la imagen con lo que se vive en el escenario. La obra es en verso. ¿No espantará a la audiencia?
Al principio a lo mejor cuesta un poco entender lo que se está diciendo, pero hemos hecho un trabajo con mucha conciencia para que se entienda todo lo que estamos expresando también mediante los estados de ánimo de los personajes. Así, incluso aunque no entiendas a veces exactamente lo que está diciendo el verso, sabes lo que pasa porque la emoción y las circunstancias te hacen comprenderlo.
¿Cuál es el gancho de esta historia para el espectador?
Hay varios; por ejemplo, para el que ya viene de Estudio 1 el recuperar algo que fue tan mágico; para el más nuevo, la curiosidad por ver algo inesperado que te acerca al teatro con un lenguaje de hoy. Y también la historia, una comedia inteligente y brillante donde hay un personaje femenino tan moderno; Leonarda es una mujer vestida del siglo XVI pero que en realidad es del siglo XXI, es mucho más libre que muchas mujeres que conozco y además transita por todos los estados de ánimo.
¿Le gusta hacer trabajos de época?
Sí; de hecho lo echaba de menos. No me vestía de época desde Volavérunt, una película que hice con Bigas Luna hace más de diez años. Me gusta moverme con estos trajes aunque luego acabo con el cuerpo machacado... En alguna otra vida me debí de sentir a gusto en la piel de alguna de estas señoras.
¿Cómo ha sido trabajar con Fran Perea, que hace de galán en la obra?
Fran es un actorazo con una gran preparación; además da gusto ver a un actor tan joven y tan galán, porque hay muchos actores fantásticos, pero galanes, en el sentido clásico de la palabra, no hay tantos.
Como ex presidenta de la Academia de Cine, ¿qué le parece que Pedro Almodóvar reapareciera en la última gala?
Una alegría enorme para todos; se ha hecho desear pero ya está aquí.