Durante un homenaje a la Guardia Civil por sus 169 años de historia, María de los Llanos de Luna, representante del ejecutivo conservador de Mariano Rajoy en Cataluña, entregó el pasado 11 de mayo un diploma a la Hermandad de Combatientes de la División Azul.
Entre 1941 y 1943, este grupo de voluntarios españoles se unió en el frente ruso al ejército nazi, aliado del dictador Francisco Franco, que dirigió España de 1939 a 1975.
El acto enfureció a la mayoría de grupos políticos de esta región del noreste del país que, a excepción del Partido Popular (derecha, en el poder en España) y Ciutadans, pidieron la dimisión de Llanos de Luna, del PP de Rajoy.
"Es necesaria una destitución inmediata", aseguró en el parlamento regional Jordi Turull, diputado de la coalición nacionalista conservadora CiU, que gobierna Cataluña, argumentando "una cuestión de respeto y consideración por las víctimas del holocausto y de la barbarie nazi".
Una petición compartida por la segunda fuerza catalana, los independentistas de izquierda de ERC, que a través de su portavoz en el congreso español, Alfred Bosch, exigieron la "destitución fulminante" de Llanos de Luna.
En un comunicado, los socialistas catalanes calificaron el acto de "absolutamente deplorable e injustificado".
Por su parte, el parlamentario regional de la coalición ecologista-comunista ICV, Jaume Bosch, aseguró que "es inaceptable que la delegada del gobierno del PP haga homenajes a excombatientes del ejército de Hitler".
El homenaje de Llanos de Luna, que en el pasado ya despertó polémica por sus opiniones, también encendió las redes sociales.
"Llanos de Luna, usted que, en plena posesión de sus facultades mentales, homenajea a la División Azul ¿qué le diría por ejemplo a Ana Frank?", lanzaba un internauta en Twitter en referencia a la adolescente judía que murió en la Alemania nazi tras escribir su tristemente célebre diario íntimo.
"Que alguien haga algo así a día de hoy es vergonzoso", "¿De qué fuentes beben algunos miembros del PP?", "Estaría bien que el ministerio del Interior firmase la expulsión inmediata de Llanos de Luna por condecorar el franquismo integral", se indignaban otros.
Entre 1941 y 1943, este grupo de voluntarios españoles se unió en el frente ruso al ejército nazi, aliado del dictador Francisco Franco, que dirigió España de 1939 a 1975.
El acto enfureció a la mayoría de grupos políticos de esta región del noreste del país que, a excepción del Partido Popular (derecha, en el poder en España) y Ciutadans, pidieron la dimisión de Llanos de Luna, del PP de Rajoy.
"Es necesaria una destitución inmediata", aseguró en el parlamento regional Jordi Turull, diputado de la coalición nacionalista conservadora CiU, que gobierna Cataluña, argumentando "una cuestión de respeto y consideración por las víctimas del holocausto y de la barbarie nazi".
Una petición compartida por la segunda fuerza catalana, los independentistas de izquierda de ERC, que a través de su portavoz en el congreso español, Alfred Bosch, exigieron la "destitución fulminante" de Llanos de Luna.
En un comunicado, los socialistas catalanes calificaron el acto de "absolutamente deplorable e injustificado".
Por su parte, el parlamentario regional de la coalición ecologista-comunista ICV, Jaume Bosch, aseguró que "es inaceptable que la delegada del gobierno del PP haga homenajes a excombatientes del ejército de Hitler".
El homenaje de Llanos de Luna, que en el pasado ya despertó polémica por sus opiniones, también encendió las redes sociales.
"Llanos de Luna, usted que, en plena posesión de sus facultades mentales, homenajea a la División Azul ¿qué le diría por ejemplo a Ana Frank?", lanzaba un internauta en Twitter en referencia a la adolescente judía que murió en la Alemania nazi tras escribir su tristemente célebre diario íntimo.
"Que alguien haga algo así a día de hoy es vergonzoso", "¿De qué fuentes beben algunos miembros del PP?", "Estaría bien que el ministerio del Interior firmase la expulsión inmediata de Llanos de Luna por condecorar el franquismo integral", se indignaban otros.