Funeral en Bagdad de un manifestante asesinado en las últimas protestas.
Trece personas murieron y 35 resultaron heridas en un atentado con coche bomba en un retén de control de la policía en Muqdadiya, una ciudad en donde conviven chiitas y sunitas situada a 90 km al noroeste de Bagdad, indicó a la AFP el comandante del ejército Abbas Al Tamimi.
En tanto, en Mosul, a 350 km al norte de Bagdad, el jeque Ali Fakhri, un imam sunita conocido por sus posiciones hostiles a Al Qaida, murió en su residencia por disparos de desconocidos que le apuntaron con pistolas equipadas con silenciadores, indicó la policía.
En la misma ciudad, un periodista fue asesinado delante de su domicilio, afirmó la policía.
"Hilal al Ahmadi, de 50 años y padre de cuatro niños, que trabajaba para dos semanarios locales, el Echo de Mosul e Iraqiyun, murió por disparos de hombres armados cuando salía de su domicilio el jueves por la mañana en Mithaq", un barrio situado en el este de la ciudad, precisó un capitán de policía que no quiso ser identificado.
La organización Reporteros Sin Fronteras condenó firmemente el atentado y reclamó una investigación a las autoridades iraquíes.
Finalmente en la capital, desconocidos colgaron a un profesor de medicina de la universidad de Bagdad, Ali Abdel Husein al Saadi, luego de ingresar en su domicilio, según una fuente del ministerio de Interior.
En tanto, en Mosul, a 350 km al norte de Bagdad, el jeque Ali Fakhri, un imam sunita conocido por sus posiciones hostiles a Al Qaida, murió en su residencia por disparos de desconocidos que le apuntaron con pistolas equipadas con silenciadores, indicó la policía.
En la misma ciudad, un periodista fue asesinado delante de su domicilio, afirmó la policía.
"Hilal al Ahmadi, de 50 años y padre de cuatro niños, que trabajaba para dos semanarios locales, el Echo de Mosul e Iraqiyun, murió por disparos de hombres armados cuando salía de su domicilio el jueves por la mañana en Mithaq", un barrio situado en el este de la ciudad, precisó un capitán de policía que no quiso ser identificado.
La organización Reporteros Sin Fronteras condenó firmemente el atentado y reclamó una investigación a las autoridades iraquíes.
Finalmente en la capital, desconocidos colgaron a un profesor de medicina de la universidad de Bagdad, Ali Abdel Husein al Saadi, luego de ingresar en su domicilio, según una fuente del ministerio de Interior.