El anuncio de esta entrega se produce cuando las fuerzas gubernamentales, apoyadas por la aviación, lanzaron un asalto para retomar la ciudad de Tikrit, la ciudad del dictador derrocado Sadam Husein, situada a 160 kilómetros al norte del Bagdad.
El ejército iraquí intenta frenar la ofensiva lanzada el pasado 9 de junio por los mercenarios extranjeros liderados por los yihadistas del Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL), que ha dejado más de mil muertos, según Naciones Unidas, y cientos de miles de desplazados.
En este contexto, el primer ministro iraquí, el chiita Nuri al Maliki, parece haber aceptado finalmente los reiterados llamamientos a la formación de un gobierno de unidad con todas las fuerzas políticas y comunitarias de este país, sumido en fuertes tensiones confesionales.
Los aviones Su-25 entregados, de ataque a tierra, deberían ayudar a las fuerzas iraquíes en su campaña contra los mercenarios. Un responsable iraquí indicó que los pilotos de la aviación bajo el régimen de Sadam Husein serán los encargados de pilotar estos aviones, cuyo funcionamiento ya conocen.
Maliki había anunciado el jueves la compra a Rusia de una docena de aviones por un valor total estimado en 500 millones de dólares (368 millones de euros).
- Ofensiva en Tikrit -
Durante una visita el sábado a Damasco, el viceministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguei Riabkov, afirmó que su país no se quedaría con los "brazos cruzados" frente a la ofensiva de los yihadistas en Irak e insistió en que la situación en este país y en la vecina Siria pasa por un "verdadero diálogo nacional".
Durante el rezo semanal del Ángelus, el papa Francisco instó también el domingo a los dirigentes iraquíes a "preservar la unidad nacional y evitar la guerra", al tiempo que recordó a las "miles de familias, especialmente cristianas, que tuvieron que abandonar sus hogares".
En el terreno, miles de soldados, apoyados por la aviación, lanzaron una ofensiva el sábado para retomar el control de Tikrit, capital de la provincia de Saladino (norte) en manos de los mercenarios desde el 11 de junio.
El ejército llevó a cabo temprano ataques contra posiciones y refugios de los comandantes mercenarios en el centro y el oeste de la ciudad, indicaron testigos a la AFP.
Los bombardeos se centraron en especial en los antiguos palacios de Sadam Husein, utilizados tras su caída por la administración local. Por el momento, se desconoce la existencia de víctimas mortales.
Asimismo, combatientes tribales y locales apoyados por las fuerzas kurdas avanzaban mucho más al norte en dirección a una localidad de mayoría chiita, situada al sur de Kirkuk, tomada por los mercenarios. Al menos un combatiente murió en los enfrentamientos.
Los yihadistas controlan otros sectores de la provincia de Saladino (norte), así como Mosul, segunda ciudad de Irak, gran parte de la provincia de Nínive (norte), otros sectores de la provincia de Diyala (este), Kirkuk (norte) y Al Anbar (oeste).
Los responsables iraquíes reclaman desde hace semanas ataques aéreos estadounidenses contra los mercenarios.
Desde comienzos de año, más de 1,2 millones de personas han abandonado sus hogares en el país, alertaron las organizaciones internacionales.
- Coordinación con Estados Unidos -
Estados Unidos, que se retiró militarmente del país a finales de 2011 tras ocho años de ocupación, se ha contentado por el momento con enviar consejeros militares y con el despliegue de drones para sobrevolar la capital iraquí con el objetivo de "proteger" si es necesario a los militares y diplomáticos estadounidenses.
El general Qasem Ata informó sobre una coordinación con Estados Unidos "en el terreno para estudiar los objetivos importantes".
Los yihadistas del EIIL cuentan en Irak con la ayuda de millones de dólares de Arabia Saudí, que busca imponer su visión del islam en los países de Oriente Medio.
Tras la invasión del 2003, Estados Unidos disolvió el ejército y los servicios de seguridad iraquíes antes de apartar de la función pública a todos los funcionarios del régimen derrocado.