Sandro Cruz: Isabel Pisano Ud. es una destacada y famosa periodista en su país de adopción [España] [1] Ud. mantuvo un contacto privilegiado con Yasir Arafat por motivos profesionales (periodismo) pero igualmente una relación sentimental con él. ¿Por qué le ha consagrado una biografía que viene de ser publicada en francés y en castellano?
Isabel Pisano: En vida y sobre todo después de su muerte, el líder irremplazable Yasir Arafat fue calumniado a ultranza. Quise devolverle al mundo en general, incluso a los ocupantes de Palestina, Irak y Afganistán y sin olvidar al martirizado Líbano, la verdadera imagen de Abu Ammar [2]. Y recordar además que los proyectos de los cinco dueños del mundo no pasarán. Porque para sustituir a Yasir Arafat, cientos de niños en los territorios ocupados están ya haciendo la fila.
Es un libro útil también, para los gobernantes desmemoriados que aceptan pasivamente el holocausto del pueblo palestino. Allí están todos los mapas de la ONU que reflejan paso a paso el expolio, ante la impasibilidad del mundo.
Yasir Arafat no morirá nunca, y asesinos de inocentes y criminales de guerra como Sharon terminarán igual a él. Es una pena que el pueblo que nos ha aportado a Albert Einstein y a tantos otros genios se deje engañar por una pandilla de codiciosos que no dicen una sola verdad, ni aún dormidos. El pueblo judío no se merece esos impresentables pero sólo en su mano está cambiar las cosas. Ojalá hubiese muchos Ury Avnery [3], ya que son los judíos, ellos y sólo ellos quienes pueden devolver la dignidad, la libertad y la tierra al pueblo palestino.
Sandro Cruz: Pero volvamos a su libro, la biografía de Yasir Arafat que Usted amo tanto. ¿Cómo se puede ser objetivo cuando una persona le subyuga?
Isabel Pisano: Cuando sobre todas las cosas prevalece en el corazón y en la mente, (dos órganos que considero sólo uno) la necesidad imperiosa de la verdad; y cuando se está seguro de que no hay cientos de verdades sino sólo una única verdad y es lo que es justo, entonces, cuando descubres eso, puedes ser tan objetivo como el Creador.
Me entregué a Palestina y a su causa sabiendo que nunca más habría de dormir sueños tranquilos, pero sólo viviendo para Palestina después de haber conocido su tragedia puedo considerar que mi vida vale la pena y que mi nacimiento no fue un accidente de la Naturaleza, que estaba desde el principio de los tiempos a eso y sólo a eso. No hay batalla más sublime, ni más alta, ni más honrosa, y ¡ay de mí! ni más dura que exigir la devolución de los derechos humanos en Palestina.
Abu Ammar lo dio todo, en todos los sentidos, renunció a tener una vida privada, a un cómodo exilio en algún país de Medio Oriente, en cambio se quedó y fue encarcelado y torturado. Un día me dijo: «Conozco todas prisiones de Oriente Medio y todos sus métodos de tortura...» La expresión de su rostro tenía un dejo de tristeza intolerable y si alguien está ciego de frente a tanto dolor e injusticia sería mejor para él y para el mundo el no haber nacido.
Sandro Cruz: Y justamente hoy 11 de noviembre 2009 se conmemorará el 5to aniversario del fallecimiento de Yasir Arafat, Usted habla en su libro de un aspecto inédito y que pocos se han atrevido hablar públicamente hasta ahora en Europa, el envenenamiento que mató a Yasir Arafat y como causa de su muerte. ¿Cómo llega a esta conclusión?
Isabel Pisano: Arafat fue envenenado. No es en absoluto una conclusión mía. Arafat ha sido envenado. Además, es la confesión que hizo Ariel Sharon a Ury Dan su amigo y confidente en «Entretiens avec Ariel Sharon» [4]. [Entrevistas con Ariel Sharon] , libro que desapareció de las librerías francesas con la velocidad del relámpago. Si Sharon junto a su compadre George W. Bush (que más tarde o más temprano terminará en los tribunales por el 11 de septiembre, demos tiempo al tiempo) mintieron o en su megalomanía Sharon se adjudicó uno de los pocos crímenes que no cometió, no lo sé.
Me baso en sus propias palabras que relata Ury Dan en su libro. Y el diálogo entre George y Ariel traslada de inmediato a la Isla de Sicilia, el reino de Cosa Nostra, unos pobres aficionados. Después hay una montaña de pruebas que se enumeran en mi libro.
Sandro Cruz: Pero haber envenado Arafat ¿esto implica que ha sido traicionado por sus más cercanos colaboradores políticos, los que tenían acceso a él?
Isabel Pisano: En efecto, sí
Sandro Cruz: Usted revela aspectos pocos conocidos de los orígenes de Arafat, su madre era descendiente directa del profeta Mahoma, su padre un notable y rico hombre de negocios. Arafat defendió siempre la comunidad cristina en el Medio Oriente y firmó el proceso de paz con el político israelí Isaac Rabin, quien será asesinado por un fanático judío un 4 de noviembre de 1995, hecho que aniquiló esta iniciativa. Sus esfuerzos nunca se concretizaron. ¿Quiénes son esos poderes que impiden la pacificación de la región y por qué razones?
Isabel Pisano: Este libro de Arafat forma parte de una tetralogía. Cuando vi caer las torres gemelas en TV comprendí que eso no lo podían haber hecho los árabes; no tienen la tecnología. Además conocía el Informe Northwoods [5] del General Letzminzer (Que lo presentó a Kennedy que lo echó con cajas destempladas de la Casa Blanca) y también esa «joya» del Informe de Iron Mountains, donde está planificado lo que después sucedió [6].
Comencé a buscar pruebas del auto-atentado y habían dejado tantas cuantas dejaría una manada de elefantes en una cristalería. Ese mismo año 2002 terminé mi libro «La sospecha», luego seguí con «Yo terrorista», un libro muy duro sobre el terrorismo de Estado, que se ha practicado con normalidad, hasta donde yo sé, en Argelia, EEUU y en Rusia.
Luego descubrí paso a paso las claves del conflicto de Palestina y por último, retrocediendo en el tiempo y buscando pruebas de éste delirante estado de cosas, llegué al principio de la Humanidad. Al lugar donde empezó la Historia del hombre, aquel «paraíso entre dos ríos», el Tigris y el Éufrates- que ya no lo es- donde se afincó la civilización sumeria. Y después de diez años de investigación nació mi obra «El papiro de Sept».
En las tablas cuneiformes de Babilonia está el secreto de nuestro origen. Las tablas conservadas en el Museo de Bagdad fueron arrojadas al suelo y quemadas con fósforo blanco, por los invasores, (ese fósforo blanco tan amado por Israel y que usó sobre los niños en Gaza).
Las tablas que se quemaron eran de seguro irrelevantes, las que hablan de nuestro origen están en los sótanos de un famoso museo newyorkino. Famoso por comprar obras de arte robadas y que son patrimonio artístico de estados soberanos expoliados por la guerra. Allí están todas las respuestas que buscamos.
Sandro Cruz: Septiembre Negro [7] era una de las fracciones del movimiento palestino implicado por ejemplo en la matanza de atletas israelíes en las olimpiadas de Munich. En ese sentido y contexto, ¿ha estado Yasir Arafat implicado en acciones terroristas en algún momento de su larga lucha por la liberación y reconocimiento del pueblo palestino?
Isabel Pisano: No. Pero sí tuvo que ver en acciones de sabotaje al principio de su lucha. Lo de Munich fue algo monstruoso en lo que Arafat no tuvo nada que ver. Él se disoció de los terroristas que cometieron un acto tan aberrante. Una sola vez los israelíes dijeron que tenían la prueba de su implicación en al atentado. Afirmaban de haber registrado una conversación entre Arafat y los cuatro secuestradores de rehenes en la Embajada de Arabia Saudita en Khartum [capital de Sudán], al principio de marzo de 1973. Pero hasta el día de hoy, jamás han difundido la cinta magnetofónica que ellos decían tener.
Sandro Cruz: Como lo dice Tariq Ramadan prologuista de vuestro libro: «la obra da, sobre el plano humano, personal y sentimental, una idea más cercana, más intima de la personalidad de Yasir Arafat» y es eso lo que llama la atención, Arafat era una persona buscando constantemente la paz para su pueblo y compromisos que lleven a una negociación con su enemigo Israel, sin embargo la prensa siempre le ha pegado una imagen del terrorista. ¿Cómo explicar este fenómeno de desinformación?
Isabel Pisano: La desinformación no es un fenómeno sino una condición indispensable para el dominio de la Humanidad. Pero son malos hasta desinformando y proceden con estereotipos. Le pongo un ejemplo, Bush padre le dijo a Saddam Hussein: «Mi paciencia tiene un límite». Bush hijo, dijo 10 años más tarde a Saddam: «Mi paciencia tiene un límite». Hace una semana Obama dijo a Irán: «Mi paciencia tiene un límite».
¿Me pregunto si estos tres tipos son reales o son robots parlantes?
Es una frase provocadora porque cualquier persona normal se pregunta si es posible que la paz del mundo dependa de la paciencia de un solo hombre.
Sandro Cruz: El pueblo palestino todavía no ha logrado su verdadera independencia ni reconocimiento en tanto que Estado. Sigue siendo un pueblo sin patria. ¿Usted piensa que Yasir Arafat ha cometido algún error en ese sentido? ¿Tenemos derecho hacerle una crítica?
Isabel Pisano: No existe la voluntad de Israel de permitir nunca un Estado palestino. Cuando los militares israelíes entraron en Palestina después de la partición lo hicieron matando y aterrando a los que huían.
En Deir Yassin, el general Sharon que tenía aproximadamente 20 años, clavó las puertas de las casas e incendió el pueblo con mujeres, niños y ancianos dentro y los quemó vivos.
Esto es historia. Si observa usted los mapas de la ONU desde 1947 al día de hoy el apoderamiento de TODO el territorio palestino es evidente.
Esto pasa ante la impasibilidad de Occidente o la complicidad. El hecho consumado sustituye al derecho como escribe Thierry Meyssan. Yasir Arafat lo intentó todo y todos sabemos lo que pasó. Los israelíes asesinaron al sheik Ahmed Yassin y Abdel Aziz al Rantissi decapitando Hamás.
Luego del fallecimiento o asesinato de Arafat no quedaban interlocutores válidos que es a lo que la clase dirigente israelí aspiraba para seguir asesinando palestinos, o expulsándolos de sus tierras, como están haciendo actualmente en Jerusalén Este.
La fuerza de espíritu de los palestinos es invencible y los dirigentes israelíes saben que tienen que matar hasta el último palestino para poder apoderarse de sus tierras. Y están en eso...
Sólo el pueblo israelí puede cambiar las cosas echando a esos gobernantes corruptos, en el mejor de los casos.
Sandro Cruz: Muchos rumores circulan sobre la esposa de Yasir Arafat, Souha, quien ha vivido en París en medio de un lujo ostentatorio, para luego instalarse en Túnez donde recientemente ha sido expulsada. Se dice también que ella ha derrochado el tesoro de la OLP (Organización para la Liberación de Palestina) y que vive con falangista libanés que participó en las masacres de Sabra y Chatila...
Isabel Pisano: Conocí a Suha y era una muchacha maravillosa y muy educada. Sobre si vivía a todo lujo no lo sé -París es una tentación para cualquier mujer- pero tiene gracia que las críticas vengan de quienes destruyeron todas, digo , TODAS las infraestructuras de Paletina, puertos, aeropuertos, centrales de luz, autopistas. La pérdida ha sido más grande que millones de Suha comprando en Dior. Pero el cinismo del ocupante no conoce límites. Ignoro por que Túnez hizo eso con Suha. Sobre Pierre Risk, con todo mi corazón, por la memoria del líder y por su hija Zahowa espero que sea una calumnia más de los sionistas.
Sandro Cruz: ¿Cuál es el aspecto del carácter o personalidad de Yasir Arafat que más le impresionaba?
Isabel Pisano: Sin ninguna duda su sentido del humor. Festejaba tanto mis comentarios sarcásticos sobre el poder que yo me sentía Benigni. (famoso cómico y actor italiano) Y en segundo lugar su romanticismo. Nunca nadie, para explicar sus sentimientos, me habló en poesía.
Sandro Cruz: Leyendo su libro no sólo aprendemos la vida de Arafat sino sobre todo la historia del pueblo palestino íntimamente ligada. Y esta historia está cargada de una violencia alucinante contra este pueblo, resulta increíble comprender como el pueblo palestino ha podido aguantar tanto genocidio y ensañamientos hasta ahora. Pero lo más sorprendente es que esta violencia viene de un país [Israel] que a su vez ha sido también víctima de un genocidio durante la Segunda Guerra Mundial. Y justamente aquí hay una aberración psicológica, una gran contradicción, no se puede seguir pasando como única víctima de un genocidio [Holocausto] y ser al mismo tiempo verdugo de un pueblo [palestino]. Justamente el Relator Especial de los Derechos Humanos de la ONU, el Sr. Goldstone viene de dar su informe donde condena a Israel por genocidio y otros crímenes de guerra en Palestina. La pregunta que me viene al espíritu: ¿qué pasa con esta sociedad israelita? ¿Son víctimas de un poder o es un pueblo que ha perdido la brújula?
Isabel Pisano: El pueblo israelí es un gran pueblo que ha dado a la Humanidad los genios más grandes en la Historia del hombre. He notado la constante desinformación a la cual es sometido a diario, y un pueblo con información deformada se convierte en una sociedad en retroceso. Además reciben a diario adoctrinamiento anti- árabe.
Los dueños del mundo continúan depredando, guerreando y desestabilizando los países con guerras y a Europa con la inmigración de los pueblos que ellos arrasan. Todo esto está calculado y programado y ya es hora que despertemos y ayudemos al pueblo judío a liberarse de esos matones de pacotilla.
Sandro Cruz: Usted hablaba de una justicia Divina, de ciertas fuerzas de la Conciencia Universal y aunque estas afirmaciones se presten a cuestionamiento por mentes racionales y cartesianas como la mía, no deja de ser curioso, que el general israelí Ariel Sharon, que siempre deseó matar a Arafat por todos los medios y que tampoco dudo un sólo momento en aniquilar niños y mujeres [por ejemplo la masacre de refugiados palestinos en Sabra y Chatila] se encuentre en un coma profundo desde mayo 2006, es decir una momia viviente, mantenido vivo artificialmente. ¿Qué otras impresiones de este tipo «sobrenatural» ha experimentado Usted durante sus largas estancias en Palestina, en medio de bombas y batallas?
Isabel Pisano: Creo, más que nada, en el espíritu del Cosmos. Y él me devuelve esa fe multiplicada en dones. Sobre lo sobrenatural prefiero no hablar. Sé que cuento con la protección del Universo porque, como todos, yo formo parte de ese único Yo universal y le estoy agradecida por su protección en todos los frentes. Con respecto al sionismo habían avanzado mucho pero ya están perdiendo su batalla.
Isabel Pisano: En vida y sobre todo después de su muerte, el líder irremplazable Yasir Arafat fue calumniado a ultranza. Quise devolverle al mundo en general, incluso a los ocupantes de Palestina, Irak y Afganistán y sin olvidar al martirizado Líbano, la verdadera imagen de Abu Ammar [2]. Y recordar además que los proyectos de los cinco dueños del mundo no pasarán. Porque para sustituir a Yasir Arafat, cientos de niños en los territorios ocupados están ya haciendo la fila.
Es un libro útil también, para los gobernantes desmemoriados que aceptan pasivamente el holocausto del pueblo palestino. Allí están todos los mapas de la ONU que reflejan paso a paso el expolio, ante la impasibilidad del mundo.
Yasir Arafat no morirá nunca, y asesinos de inocentes y criminales de guerra como Sharon terminarán igual a él. Es una pena que el pueblo que nos ha aportado a Albert Einstein y a tantos otros genios se deje engañar por una pandilla de codiciosos que no dicen una sola verdad, ni aún dormidos. El pueblo judío no se merece esos impresentables pero sólo en su mano está cambiar las cosas. Ojalá hubiese muchos Ury Avnery [3], ya que son los judíos, ellos y sólo ellos quienes pueden devolver la dignidad, la libertad y la tierra al pueblo palestino.
Sandro Cruz: Pero volvamos a su libro, la biografía de Yasir Arafat que Usted amo tanto. ¿Cómo se puede ser objetivo cuando una persona le subyuga?
Isabel Pisano: Cuando sobre todas las cosas prevalece en el corazón y en la mente, (dos órganos que considero sólo uno) la necesidad imperiosa de la verdad; y cuando se está seguro de que no hay cientos de verdades sino sólo una única verdad y es lo que es justo, entonces, cuando descubres eso, puedes ser tan objetivo como el Creador.
Me entregué a Palestina y a su causa sabiendo que nunca más habría de dormir sueños tranquilos, pero sólo viviendo para Palestina después de haber conocido su tragedia puedo considerar que mi vida vale la pena y que mi nacimiento no fue un accidente de la Naturaleza, que estaba desde el principio de los tiempos a eso y sólo a eso. No hay batalla más sublime, ni más alta, ni más honrosa, y ¡ay de mí! ni más dura que exigir la devolución de los derechos humanos en Palestina.
Abu Ammar lo dio todo, en todos los sentidos, renunció a tener una vida privada, a un cómodo exilio en algún país de Medio Oriente, en cambio se quedó y fue encarcelado y torturado. Un día me dijo: «Conozco todas prisiones de Oriente Medio y todos sus métodos de tortura...» La expresión de su rostro tenía un dejo de tristeza intolerable y si alguien está ciego de frente a tanto dolor e injusticia sería mejor para él y para el mundo el no haber nacido.
Sandro Cruz: Y justamente hoy 11 de noviembre 2009 se conmemorará el 5to aniversario del fallecimiento de Yasir Arafat, Usted habla en su libro de un aspecto inédito y que pocos se han atrevido hablar públicamente hasta ahora en Europa, el envenenamiento que mató a Yasir Arafat y como causa de su muerte. ¿Cómo llega a esta conclusión?
Isabel Pisano: Arafat fue envenenado. No es en absoluto una conclusión mía. Arafat ha sido envenado. Además, es la confesión que hizo Ariel Sharon a Ury Dan su amigo y confidente en «Entretiens avec Ariel Sharon» [4]. [Entrevistas con Ariel Sharon] , libro que desapareció de las librerías francesas con la velocidad del relámpago. Si Sharon junto a su compadre George W. Bush (que más tarde o más temprano terminará en los tribunales por el 11 de septiembre, demos tiempo al tiempo) mintieron o en su megalomanía Sharon se adjudicó uno de los pocos crímenes que no cometió, no lo sé.
Me baso en sus propias palabras que relata Ury Dan en su libro. Y el diálogo entre George y Ariel traslada de inmediato a la Isla de Sicilia, el reino de Cosa Nostra, unos pobres aficionados. Después hay una montaña de pruebas que se enumeran en mi libro.
Sandro Cruz: Pero haber envenado Arafat ¿esto implica que ha sido traicionado por sus más cercanos colaboradores políticos, los que tenían acceso a él?
Isabel Pisano: En efecto, sí
Sandro Cruz: Usted revela aspectos pocos conocidos de los orígenes de Arafat, su madre era descendiente directa del profeta Mahoma, su padre un notable y rico hombre de negocios. Arafat defendió siempre la comunidad cristina en el Medio Oriente y firmó el proceso de paz con el político israelí Isaac Rabin, quien será asesinado por un fanático judío un 4 de noviembre de 1995, hecho que aniquiló esta iniciativa. Sus esfuerzos nunca se concretizaron. ¿Quiénes son esos poderes que impiden la pacificación de la región y por qué razones?
Isabel Pisano: Este libro de Arafat forma parte de una tetralogía. Cuando vi caer las torres gemelas en TV comprendí que eso no lo podían haber hecho los árabes; no tienen la tecnología. Además conocía el Informe Northwoods [5] del General Letzminzer (Que lo presentó a Kennedy que lo echó con cajas destempladas de la Casa Blanca) y también esa «joya» del Informe de Iron Mountains, donde está planificado lo que después sucedió [6].
Comencé a buscar pruebas del auto-atentado y habían dejado tantas cuantas dejaría una manada de elefantes en una cristalería. Ese mismo año 2002 terminé mi libro «La sospecha», luego seguí con «Yo terrorista», un libro muy duro sobre el terrorismo de Estado, que se ha practicado con normalidad, hasta donde yo sé, en Argelia, EEUU y en Rusia.
Luego descubrí paso a paso las claves del conflicto de Palestina y por último, retrocediendo en el tiempo y buscando pruebas de éste delirante estado de cosas, llegué al principio de la Humanidad. Al lugar donde empezó la Historia del hombre, aquel «paraíso entre dos ríos», el Tigris y el Éufrates- que ya no lo es- donde se afincó la civilización sumeria. Y después de diez años de investigación nació mi obra «El papiro de Sept».
En las tablas cuneiformes de Babilonia está el secreto de nuestro origen. Las tablas conservadas en el Museo de Bagdad fueron arrojadas al suelo y quemadas con fósforo blanco, por los invasores, (ese fósforo blanco tan amado por Israel y que usó sobre los niños en Gaza).
Las tablas que se quemaron eran de seguro irrelevantes, las que hablan de nuestro origen están en los sótanos de un famoso museo newyorkino. Famoso por comprar obras de arte robadas y que son patrimonio artístico de estados soberanos expoliados por la guerra. Allí están todas las respuestas que buscamos.
Sandro Cruz: Septiembre Negro [7] era una de las fracciones del movimiento palestino implicado por ejemplo en la matanza de atletas israelíes en las olimpiadas de Munich. En ese sentido y contexto, ¿ha estado Yasir Arafat implicado en acciones terroristas en algún momento de su larga lucha por la liberación y reconocimiento del pueblo palestino?
Isabel Pisano: No. Pero sí tuvo que ver en acciones de sabotaje al principio de su lucha. Lo de Munich fue algo monstruoso en lo que Arafat no tuvo nada que ver. Él se disoció de los terroristas que cometieron un acto tan aberrante. Una sola vez los israelíes dijeron que tenían la prueba de su implicación en al atentado. Afirmaban de haber registrado una conversación entre Arafat y los cuatro secuestradores de rehenes en la Embajada de Arabia Saudita en Khartum [capital de Sudán], al principio de marzo de 1973. Pero hasta el día de hoy, jamás han difundido la cinta magnetofónica que ellos decían tener.
Sandro Cruz: Como lo dice Tariq Ramadan prologuista de vuestro libro: «la obra da, sobre el plano humano, personal y sentimental, una idea más cercana, más intima de la personalidad de Yasir Arafat» y es eso lo que llama la atención, Arafat era una persona buscando constantemente la paz para su pueblo y compromisos que lleven a una negociación con su enemigo Israel, sin embargo la prensa siempre le ha pegado una imagen del terrorista. ¿Cómo explicar este fenómeno de desinformación?
Isabel Pisano: La desinformación no es un fenómeno sino una condición indispensable para el dominio de la Humanidad. Pero son malos hasta desinformando y proceden con estereotipos. Le pongo un ejemplo, Bush padre le dijo a Saddam Hussein: «Mi paciencia tiene un límite». Bush hijo, dijo 10 años más tarde a Saddam: «Mi paciencia tiene un límite». Hace una semana Obama dijo a Irán: «Mi paciencia tiene un límite».
¿Me pregunto si estos tres tipos son reales o son robots parlantes?
Es una frase provocadora porque cualquier persona normal se pregunta si es posible que la paz del mundo dependa de la paciencia de un solo hombre.
Sandro Cruz: El pueblo palestino todavía no ha logrado su verdadera independencia ni reconocimiento en tanto que Estado. Sigue siendo un pueblo sin patria. ¿Usted piensa que Yasir Arafat ha cometido algún error en ese sentido? ¿Tenemos derecho hacerle una crítica?
Isabel Pisano: No existe la voluntad de Israel de permitir nunca un Estado palestino. Cuando los militares israelíes entraron en Palestina después de la partición lo hicieron matando y aterrando a los que huían.
En Deir Yassin, el general Sharon que tenía aproximadamente 20 años, clavó las puertas de las casas e incendió el pueblo con mujeres, niños y ancianos dentro y los quemó vivos.
Esto es historia. Si observa usted los mapas de la ONU desde 1947 al día de hoy el apoderamiento de TODO el territorio palestino es evidente.
Esto pasa ante la impasibilidad de Occidente o la complicidad. El hecho consumado sustituye al derecho como escribe Thierry Meyssan. Yasir Arafat lo intentó todo y todos sabemos lo que pasó. Los israelíes asesinaron al sheik Ahmed Yassin y Abdel Aziz al Rantissi decapitando Hamás.
Luego del fallecimiento o asesinato de Arafat no quedaban interlocutores válidos que es a lo que la clase dirigente israelí aspiraba para seguir asesinando palestinos, o expulsándolos de sus tierras, como están haciendo actualmente en Jerusalén Este.
La fuerza de espíritu de los palestinos es invencible y los dirigentes israelíes saben que tienen que matar hasta el último palestino para poder apoderarse de sus tierras. Y están en eso...
Sólo el pueblo israelí puede cambiar las cosas echando a esos gobernantes corruptos, en el mejor de los casos.
Sandro Cruz: Muchos rumores circulan sobre la esposa de Yasir Arafat, Souha, quien ha vivido en París en medio de un lujo ostentatorio, para luego instalarse en Túnez donde recientemente ha sido expulsada. Se dice también que ella ha derrochado el tesoro de la OLP (Organización para la Liberación de Palestina) y que vive con falangista libanés que participó en las masacres de Sabra y Chatila...
Isabel Pisano: Conocí a Suha y era una muchacha maravillosa y muy educada. Sobre si vivía a todo lujo no lo sé -París es una tentación para cualquier mujer- pero tiene gracia que las críticas vengan de quienes destruyeron todas, digo , TODAS las infraestructuras de Paletina, puertos, aeropuertos, centrales de luz, autopistas. La pérdida ha sido más grande que millones de Suha comprando en Dior. Pero el cinismo del ocupante no conoce límites. Ignoro por que Túnez hizo eso con Suha. Sobre Pierre Risk, con todo mi corazón, por la memoria del líder y por su hija Zahowa espero que sea una calumnia más de los sionistas.
Sandro Cruz: ¿Cuál es el aspecto del carácter o personalidad de Yasir Arafat que más le impresionaba?
Isabel Pisano: Sin ninguna duda su sentido del humor. Festejaba tanto mis comentarios sarcásticos sobre el poder que yo me sentía Benigni. (famoso cómico y actor italiano) Y en segundo lugar su romanticismo. Nunca nadie, para explicar sus sentimientos, me habló en poesía.
Sandro Cruz: Leyendo su libro no sólo aprendemos la vida de Arafat sino sobre todo la historia del pueblo palestino íntimamente ligada. Y esta historia está cargada de una violencia alucinante contra este pueblo, resulta increíble comprender como el pueblo palestino ha podido aguantar tanto genocidio y ensañamientos hasta ahora. Pero lo más sorprendente es que esta violencia viene de un país [Israel] que a su vez ha sido también víctima de un genocidio durante la Segunda Guerra Mundial. Y justamente aquí hay una aberración psicológica, una gran contradicción, no se puede seguir pasando como única víctima de un genocidio [Holocausto] y ser al mismo tiempo verdugo de un pueblo [palestino]. Justamente el Relator Especial de los Derechos Humanos de la ONU, el Sr. Goldstone viene de dar su informe donde condena a Israel por genocidio y otros crímenes de guerra en Palestina. La pregunta que me viene al espíritu: ¿qué pasa con esta sociedad israelita? ¿Son víctimas de un poder o es un pueblo que ha perdido la brújula?
Isabel Pisano: El pueblo israelí es un gran pueblo que ha dado a la Humanidad los genios más grandes en la Historia del hombre. He notado la constante desinformación a la cual es sometido a diario, y un pueblo con información deformada se convierte en una sociedad en retroceso. Además reciben a diario adoctrinamiento anti- árabe.
Los dueños del mundo continúan depredando, guerreando y desestabilizando los países con guerras y a Europa con la inmigración de los pueblos que ellos arrasan. Todo esto está calculado y programado y ya es hora que despertemos y ayudemos al pueblo judío a liberarse de esos matones de pacotilla.
Sandro Cruz: Usted hablaba de una justicia Divina, de ciertas fuerzas de la Conciencia Universal y aunque estas afirmaciones se presten a cuestionamiento por mentes racionales y cartesianas como la mía, no deja de ser curioso, que el general israelí Ariel Sharon, que siempre deseó matar a Arafat por todos los medios y que tampoco dudo un sólo momento en aniquilar niños y mujeres [por ejemplo la masacre de refugiados palestinos en Sabra y Chatila] se encuentre en un coma profundo desde mayo 2006, es decir una momia viviente, mantenido vivo artificialmente. ¿Qué otras impresiones de este tipo «sobrenatural» ha experimentado Usted durante sus largas estancias en Palestina, en medio de bombas y batallas?
Isabel Pisano: Creo, más que nada, en el espíritu del Cosmos. Y él me devuelve esa fe multiplicada en dones. Sobre lo sobrenatural prefiero no hablar. Sé que cuento con la protección del Universo porque, como todos, yo formo parte de ese único Yo universal y le estoy agradecida por su protección en todos los frentes. Con respecto al sionismo habían avanzado mucho pero ya están perdiendo su batalla.