Un responsable estadounidense confirmó a la AFP un "ataque israelí", pero no suministró detalles sobre el objetivo.
"En el pasado, los objetivos fueron misiles transferidos al Hezbolá", agregó.
Responsables del gobierno israelí rechazaron confirmar cualquier información sobre ese ataque.
Citando "fuentes exclusivas" que no nombró, la cadena de capitales saudíes indicó que "el bombardeo tuvo como objetivo un cargamento de misiles tierra-aire que estaba destinado al Hezbolá en el líbano", en referencia al poderoso movimiento chiita libanés que combate a los rebeldes al lado de las fuerzas sirias.
La cadena estadounidense CNN, que cita de manera anónima a un responsable de la administración estadounidense, también indicó que aviones de combate israelíes realizaron el ataque, contra misiles y equipo asociado que los israelíes pensaron podrían ser trasladados al Hezbolá.
Más temprano, una ONG siria, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, registró varias explosiones escuchadas el miércoles al alba en una base de defensa aérea siria en Sonar Jablé, cerca de Latakia, en la costa siria.
Esta organización que se apoya en una red de militantes y fuentes médicas no pudo identificar el origen de las explosiones.
Una fuente de seguridad siria había afirmado por su parte que un misil cayó cerca de una base en esta región, sin causar daños.
A inicios de mayo, un alto responsable israelí había afirmado que el Estado hebreo había llevado a cabo ataques aéreos durante tres días en Siria contra armas destinadas al Hezbolá.
"Cada vez que informaciones lleguen a Israel sobre el traslado de misiles o armamento de Siria o Líbano, serán atacados", aseguró el responsable israelí, aludiendo al Hezbolá, enemigo jurado del Estado hebreo.