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Con 60 años recién cumplidos, de pequeña estatura, larga cabellera gris y fuerte personalidad, Campion regresa a Cannes - que la descubrió en 1986, cuando su cortometraje "Peel" le brindó su primera Palma de oro - para otorgar el premio que la crítica mundial considera el más prestigioso del Séptimo Arte.
Aunque estará rodeada en el jurado de nueve actores y cineastas - cinco mujeres y cuatro hombres, entre ellos el mexicano Gabriel García Bernal- su visión y sensibilidad serán decisivas en la atribución de los premios de esta fiesta del cine mundial, que se abre el miércoles en la Costa Azul francesa.
¿Quién es Jane Campion, y cuál es la huella que ha dejado en el cine?
- Protagonistas mujeres centran toda su obra -
Según el influyente crítico de cine francés Michel Ciment, que consagra a la cineasta un libro que saldrá el 20 de mayo, en pleno festival, lo que interesa a Campion son las protagonistas.
"En cada uno de sus filmes hay en el centro una protagonista que lucha por su autonomía psiquíca y sensual, que busca su subjetividad", opina Ciment en "Jane Campion por Jane Campion" (Editions Cahiers du Cinéma).
La rebeldía y búsquedas de Campion empezaron desde jovencita: en una familia de teatreros - sus padres, ex alumnos del venerable Old Vic de Londres, fundaron en Nueva Zelanda uno de los grupos de teatro más respetados - ella prefirió estudiar antropología y después arte. A los 26 años, tras ver "Bella de día", del español Luis Buñuel, se consagró al cine.
Tres años después de su primer triunfo en Cannes, Campion regresó con su primer largo, "Sweetie", que compitió por la Palma y que fue el primero de sus retratos de mujeres en contradicción con el mundo que las rodea. Mujeres que, en algo o en mucho, se le parecen.
De todas sus protagonistas, quizá la más famosa es Ada, la de "El piano" (1993), que le valió a Campion la Palma de oro y tres Óscar, entre ellos uno para su intérprete, Holly Hunter.
Este hilo conductor de su cine se refleja también en "Retrato de una dama" con Nicole Kidman (1996) -la estrella de "Grace", el filme de apertura de esta edición de Cannes - y en "Holy Smoke" con Kate Winslet (1999).
- El amor por la poesía y la pintura marcan su cine-
Otro rasgo que marca su cine: su amor por la literatura, por la poesía. En "Un Angel en mi mesa" (1990), ofrece un retrato doloroso y sensible de la escritora neozelandesa Janet Frame, y la protagonista de "In the Cut" (2003) es una profesora de literatura inglesa.
El lirismo de "Bright Star" (2009), en el que rinde tributo a John Keats, no oculta sin embargo que el interés de Campion no es tanto el poeta, sino su vecina, una chica romántica y poco convencional, subyugada por los versos del joven poeta, quien murió a los 25 años de tuberculosis.
Sus estudios de arte se reflejan en sus ambientes impregnados de luz y claroscuros. En "Bright Star", los jardines parecen salidos de la brocha de Monet, los interiores evocan los lienzos de Vermeer.
Su amor por el arte permite anticipar que Campion se sentirá probablemente atraída por "Mr Turner", del británico Mike Leigh sobre el artista de maravillosos colores, que compite por la Palma de Oro.
- Campion explora ahora la televisión -
Sesentona pero siempre rebelde, Campion quiere ahora explorar otros medios. La BBC le ofrece coproducirle una película, ella propone en cambio una serie de televisión en seis episodios: "Top of the lake", una coproducción entre Estados Unidos, Australia y Gran Bretaña rodada en Nueva Zelanda.
"Se pueden hacer cosas en la televisión menos convencionales que en el cine", asegura.
La serie cuenta la desaparición de una niña de 12 años, hija de un narcotraficante. La actriz de "Madmen", Peggy Olsen, es la detective que investiga el caso, cuya violencia constrasta con la belleza casi onírica del paisaje.
El triunfo que le han brindado público y crítica a la serie validan la opción de Campion, cuya obra está impregnada de pasión, algo que comparte con Cannes.
"Lo que hace que Cannes sea indiscutible es la pasión" que arrastra, dice. "Es un lugar mítico y sorprendente", donde se revelan actores, los filmes encuentran productores y se lanzan carreras. "Lo sé porque me pasó a mí", confió Campion.
