Jurgen Boos
"Amazon, Google y Apple son magos de la logística, pero no son editores y no tienen pasión por la edición", declaró Jurgen Boos, director del salón del Libro de Fráncfort, en una rueda de prensa este martes, en vísperas de la inauguración oficial.
Son "máquinas para fidelizar a la clientela, que no sólo dominan el comercio en línea, sino también los soportes de lectura, y de esta manera tienen a los lectores bajo su control", añadió, subrayando que la diversidad de obras editadas necesita una diversidad de actores en el mercado.
Boos consideró a "Francia como un ejemplo en muchos terrenos" al responder a una pregunta sobre la adopción el jueves pasado de un proyecto de ley que impedirá a los operadores en línea, como el gigante norteamericano Amazon, acumular la gratuidad de gastos de transporte de los libros con el descuento de 5% autorizado en el país.
"Podemos aprender mucho de Francia", opinó. "En el pasado, creíamos que podíamos seguir siendo competitivos con unas inversiones débiles frente a una empresa como Amazon. Ahora realmente necesitamos movernos si queremos continuar en la carrera", dijo Gottfried Honnefelder, director de la Asociación de Libreros y Editores alemanes.
Las jóvenes promesas y las innovaciones digitales están en el primer plano de esta edición de la Feria del Libro de Fráncfort, gran encuentro mundial de la edición, que abre sus puertas el miércoles.
A pesar de "los desafíos a los que se enfrenta nuestra industria durante este periodo de profundos cambios, hay muchas razones para mirar el futuro con optimismo y confianza", declaró este martes Stephen Smith, director de Wiley, una de las principales editoriales científicas.
En Alemania, el volumen de negocios de los tres principales canales de distribución de libros -librerías, comercio en línea y grandes superficies- aumentó un 0,8% entre enero y septiembre.
"No es una diferencia muy grande, pero es una tendencia", consideró Honnefelder.
Son "máquinas para fidelizar a la clientela, que no sólo dominan el comercio en línea, sino también los soportes de lectura, y de esta manera tienen a los lectores bajo su control", añadió, subrayando que la diversidad de obras editadas necesita una diversidad de actores en el mercado.
Boos consideró a "Francia como un ejemplo en muchos terrenos" al responder a una pregunta sobre la adopción el jueves pasado de un proyecto de ley que impedirá a los operadores en línea, como el gigante norteamericano Amazon, acumular la gratuidad de gastos de transporte de los libros con el descuento de 5% autorizado en el país.
"Podemos aprender mucho de Francia", opinó. "En el pasado, creíamos que podíamos seguir siendo competitivos con unas inversiones débiles frente a una empresa como Amazon. Ahora realmente necesitamos movernos si queremos continuar en la carrera", dijo Gottfried Honnefelder, director de la Asociación de Libreros y Editores alemanes.
Las jóvenes promesas y las innovaciones digitales están en el primer plano de esta edición de la Feria del Libro de Fráncfort, gran encuentro mundial de la edición, que abre sus puertas el miércoles.
A pesar de "los desafíos a los que se enfrenta nuestra industria durante este periodo de profundos cambios, hay muchas razones para mirar el futuro con optimismo y confianza", declaró este martes Stephen Smith, director de Wiley, una de las principales editoriales científicas.
En Alemania, el volumen de negocios de los tres principales canales de distribución de libros -librerías, comercio en línea y grandes superficies- aumentó un 0,8% entre enero y septiembre.
"No es una diferencia muy grande, pero es una tendencia", consideró Honnefelder.