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Davis-a la izquierda-y Barnier
"El periodo de transición después de la salida oficial en marzo de 2019 -y establecido hasta finales de 2020- será muy útil para que las administraciones y empresas se preparen para el futuro", dijo Barnier.
Reino Unido se comprometió a garantizar los mismos derechos para los ciudadanos de la UE que lleguen al país durante el periodo de transición que los que tienen quienes arriben antes del "Brexit", explicó Barnier. Lo mismo se aplicará para los ciudadanos británicos que se muden a otro país de la UE durante el plazo transitorio.
Durante ese tiempo Reino Unido seguirá rigiéndose por las reglas de la UE y pagando sus contribuciones monetarias al bloque, aunque no tendrá voto en los procesos de toma de decisión. A cambio, el país seguirá teniendo acceso al mercado interno y seguirá formando parte de la unión aduanera.
"Nos comprometimos a trabajar de buena fe durante ese periodo y a seguir respetando el principio de cooperación leal y sincera", dijo Barnier.
Bruselas quiere lograr un acuerdo general de salida del Reino Unido para octubre, ya que está previsto que el país abandone el bloque en marzo de 2019. La etapa de transición sólo entrará en vigor en el marco de ese acuerdo de salida, sobre el que hay un amplio acuerdo pero siguen abiertos muchos puntos, dijo Barnier.
El jefe negociador británico, David Davis, saludó hoy el acuerdo sobre el periodo de transición, afirmando que se está "más cerca que nunca" de lograr "un buen acuerdo" general sobre el "Brexit".
Londres aceptó que el periodo de transición termine el 31 de diciembre de 2020, aunque inicialmente pedía que el final de ese plazo fuese flexible. "Está suficientemente cerca de los dos años que pedíamos", apuntó Davis.
También la UE hizo concesiones: durante el plazo transitorio Reino Unido podrá negociar y ratificar acuerdos comerciales con otros países, aunque estos sólo entrarán en vigor a partir de 2021.
Barnier advirtió que todavía quedan pendientes algunas cuestiones claves del acuerdo general, como la manera de evitar controles fronterizos entre la región británica de Irlanda del Norte y la República de Irlanda.
El negociador de la UE insistió en que esa cuestión tendrá que resolverse dentro del marco del acuerdo de salida del Reino Unido, y no en las posteriores negociaciones de un acuerdo comercial, como ha planteado Londres.
"Nada está acordado hasta que todo está acordado, y eso se aplica a todo en el texto", apuntó Barnier.
Reino Unido se comprometió a garantizar los mismos derechos para los ciudadanos de la UE que lleguen al país durante el periodo de transición que los que tienen quienes arriben antes del "Brexit", explicó Barnier. Lo mismo se aplicará para los ciudadanos británicos que se muden a otro país de la UE durante el plazo transitorio.
Durante ese tiempo Reino Unido seguirá rigiéndose por las reglas de la UE y pagando sus contribuciones monetarias al bloque, aunque no tendrá voto en los procesos de toma de decisión. A cambio, el país seguirá teniendo acceso al mercado interno y seguirá formando parte de la unión aduanera.
"Nos comprometimos a trabajar de buena fe durante ese periodo y a seguir respetando el principio de cooperación leal y sincera", dijo Barnier.
Bruselas quiere lograr un acuerdo general de salida del Reino Unido para octubre, ya que está previsto que el país abandone el bloque en marzo de 2019. La etapa de transición sólo entrará en vigor en el marco de ese acuerdo de salida, sobre el que hay un amplio acuerdo pero siguen abiertos muchos puntos, dijo Barnier.
El jefe negociador británico, David Davis, saludó hoy el acuerdo sobre el periodo de transición, afirmando que se está "más cerca que nunca" de lograr "un buen acuerdo" general sobre el "Brexit".
Londres aceptó que el periodo de transición termine el 31 de diciembre de 2020, aunque inicialmente pedía que el final de ese plazo fuese flexible. "Está suficientemente cerca de los dos años que pedíamos", apuntó Davis.
También la UE hizo concesiones: durante el plazo transitorio Reino Unido podrá negociar y ratificar acuerdos comerciales con otros países, aunque estos sólo entrarán en vigor a partir de 2021.
Barnier advirtió que todavía quedan pendientes algunas cuestiones claves del acuerdo general, como la manera de evitar controles fronterizos entre la región británica de Irlanda del Norte y la República de Irlanda.
El negociador de la UE insistió en que esa cuestión tendrá que resolverse dentro del marco del acuerdo de salida del Reino Unido, y no en las posteriores negociaciones de un acuerdo comercial, como ha planteado Londres.
"Nada está acordado hasta que todo está acordado, y eso se aplica a todo en el texto", apuntó Barnier.
