La izquierda francesa se hace con el control de 21 de las 23 regiones


El ministro del Interior francés, Brice Hortefeux, confirmó este domingo la victoria de los partidos de izquierda en la segunda vuelta de la elecciones regionales celebradas este fin de semana con el 54 por ciento de los sufragios, lo que le da una amplia mayoría frente al 36 por ciento cosechado por la Unión por un Movimiento Popular (UMP), el partido de centro derecha en el Gobierno.



Martine Aubry, líder del Partido Socialista
Martine Aubry, líder del Partido Socialista
París. (Agencias).- Este resultado permite a las fuerzas de izquierda formar Gobierno en 21 de las 23 regiones donde se celebraron elecciones. La abstención en esta segunda vuelta electoral se ha situado en el 48,81 por ciento, casi cinco puntos menos que en la registrada en la primera vuelta (53,67 por ciento), mientras que la formación ultraderechista Frente Nacional ha obtenido en torno al diez por ciento de los sufragios en todo el país y ha obtenido cerca de un cuarto de los apoyos en algunas regiones.

Este resultado adverso obtenido por la UMP liderada por el presidente francés, Nicolás Sarkozy, es similar al cosechado en las elecciones regionales de 2004 (36,9 por ciento de los votos), mientras que la izquierda progresa cuatro puntos en relación a estos comicios, en los que obtuvo el 49,9 por ciento de los sufragios.

Tras las elecciones de este domingo, la UMP sólo controla las regiones de Alsacia (donde obtuvo una cómoda mayoría del 46 por ciento), Reunión y Guayana, mientras que perdió en Córcega, donde la derecha gobierna desde hace 26 años.

Allí las listas de izquierda obtuvieron un 36,6 por ciento de los votos frente al 27,6 por ciento de la UMP. En esta región, además, la suma del respaldo obtenido por dos partidos nacionalistas (35,74 por ciento) es casi igual al obtenido por las formaciones izquierdistas.

La participación fue ligeramente superior en esta segunda vuelta de los comicios regionales, considerados una prueba de fuego para el partido de Sarkozy, después del histórico 53,6% de abstención de la primera vuelta, disputada el pasado 14 de marzo.

En torno al 50% de los franceses acudieron a las urnas, cerca de un 4% de incremento con relación al domingo pasado, cuando se había demostrado el escaso interés de los ciudadanos por unas elecciones que llegan a dos años de las presidenciales, la verdadera prueba para el inquilino del Elíseo.

Fillon: "Una decepción para la mayoría"
El primer ministro, François Fillon, admitió la derrota no mucho tiempo después del cierre de los colegios electorales y aseguró que la crisis económica, "que no nos ha facilitado la tarea", es una de las causas que explican lo ocurrido.

El jefe del Gobierno, que reconoció "el éxito de las listas de la izquierda", declaró que los resultados, que indican un retroceso de la UMP son "una decepción para la mayoría". "No hemos sabido convencer", estimó Fillon quien, no obstante, defendió que "la relación de fuerzas de las regionales de 2004 permanece sin variaciones en general", pese a lo cual insistió en la "decepción" que significa para la UMP el avance del Partido Socialista (PS).

"Asumo mi parte de responsabilidad", agregó el primer ministro, que goza de niveles de popularidad superiores a los del propio Sarkozy. "La crisis mundial no nos ha facilitado la tarea", añadió el primer ministro, quien aseguró: "la brutalidad de la recesión económica ha dejado huellas, el miedo al futuro ha fragilizado nuestro pacto social, la crisis agrícola ha golpeado al mundo rural".

La líder de los socialistas franceses, Martine Aubry, calificó de "victoria sin precedentes" los resultados de las elecciones regionales para su partido y aseguró que los electores le votaron en búsqueda de protección. En un entorno de crisis económica, la primera secretaria del PS dijo que los franceses "han elegido a regiones de izquierda que les protegen y mejoran su vida cotidiana", en alusión a los gobiernos regionales en juego en los comicios. "Los franceses han dado una victoria sin precedenes a las listas de la izquierda reunida", dijo Aubry, quien afirmó que el PS recibe esta victoria "con responsabilidad".

La líder socialista estimó que mediante su voto, "pero para muchos también con la abstención", los franceses "además han expresado su rechazo a la política del presidente de la República (el conservador Nicolas Sarkozy) y a su Gobierno". Aubry aprovechó para criticar -y dijo que los franceses que han votado a los socialistas también lo hicieron con su sufragio- "una política injusta de regalos fiscales para los más privilegiados en detrimento del empleo, de la lucha contra el paro y del poder adquisitivo de los asalariados y los jubilados".

Su rival de hace unos meses al frente del partido y ex candidata derrotada para las presidenciales contra Sarkozy, Segolène Royal, alcanzó en su región de Poitou-Charentes un más que holgado 60,61% de los sufragios en su candidatura conjunta con los verdes de Europe Ecologie, frente al 39,39% que alcanzó el candidato de la UMP, el secretario de Transportes Dominique Bussereau.

Marine Le Pen, vicepresidenta del derechista Frente Nacional (FN), que según el sondeo publicado por el diario Le Monde logró un 17,5% de los sufragios en las regiones donde se presentó, aseguró que el incremento de votos para su partido es "un éxito enorme". En totales nacionales, el partido fundado por Jean-Marie Le pen merodea en torno al 9%, según los resultados avanzados por varios institutos de sondeos, aunque en algunas regiones puede superar el 20% de los sufragios.
Lunes, 22 de Marzo 2010
La Vanguardia, Barcelona, España
           


Nuevo comentario:

Noticias | Política | Ideas | Personalidades | Doctrinas | Cultura | Patrimonio cultural | Libros | Diálogo | Investigación | Literatura | Artes | Educación | Comunicación | Ciencia | Entretenimiento | Turismo | Sociedad | Deporte