El 31 de marzo, las tropas iraquíes retomaron el control de esta ciudad estratégica, situada a 160 kilómetros de Bagdad, y ocupada por el EI desde la ofensiva fulgurante lanzada sobre Irak en junio de 2014.
Las tropas encontraron once fosas comunes, y "el número de cadáveres exhumados hasta ahora asciende a 47", explicó a la AFP el portavoz del ministerio de Derechos Humanos, Kamel Amin.
Los cadáveres, según el portavoz, podrían pertenecer a víctimas de la masacre de Speicher, una base militar situada en el límite norte de Tikrit, que fue atacada en junio de 2014 por el EI. Los yihadistas habrían ejecutados a cientos de reclutas, la mayoría chiitas.
Amin señaló que las pruebas de ADN confirmarán o refutarán esta hipótesis.
La reconquista de Tikrit es la victoria más importante de las fuerzas iraquíes desde que iniciaran operaciones para recuperar el terreno perdido, tras la desbandada inicial frente a los yihadistas.
En la operación de junio, el EI logró hacerse con vastos territorios al oeste, al este y al norte de Bagdad, entre ellos, la segunda ciudad del país, Mosul.
Para enfrentarse a ellos, las fuerzas iraquíes están contando con el apoyo de milicias chiitas y tribus sunitas, así como con el apoyo de Irán.