Sin embargo, y según los informes de prensa, el juez Saqr también ha ordenado que los cuatro permanezcan en prisión, en espera de una decisión sobre su destino por parte del Tribunal Especial para Líbano (TEL), con sede en La Haya.
Los cuatro oficiales son: Yamil Sayyed de la Seguridad General, Mustafa Hamdan de la Brigada de la Guardia Presidencial, Raymond Azar del Servicio de Inteligencia del Ejército y Ali Hayy de las Fuerzas de Seguridad Internas. Ellos han estado detenidos arbitrariamente sin cargos desde 2005 por recomendación del antiguo investigador de la ONU, Detlev Mehlis, en base a testimonios fabricados, de falsos testigos.
Saqr dio a conocer su decisión en el momento en el que aprobó la transferencia de documentos libaneses, vinculados a la investigación sobre el asesinato de Hariri, al Tribunal, creado para juzgar a los sospechosos del caso, y los de otras relevantes figuras libanesas.
“El sistema judicial de Líbano ha decidido apartarse del caso y detener su investigación,” dijo Saqr en su auto. Él añadió que le correspondía al TEL decidir si los cuatro generales, que no han sido formalmente acusados, permanecerán o no en prisión.
El abogado de Sayyed, Akram Azuri, dio la bienvenida a la decisión del miércoles, señalando que era un buen augurio para su cliente. “Esto significa que los generales no continúan siendo acusados ni pueden ser considerados bajo arresto,” señaló. “Ahora están simplemente detenidos y el auto del juez ha puesto fin al caso entre nosotros y la Justicia libanesa.” Él añadió que esperaba que el TEL emitiera un auto ordenando la liberación de sus clientes y de los otros generales en los próximos días.
El tribunal de la ONU hizo el mes pasado un llamamiento a Líbano para que entregara los documentos relativos al caso Hariri y los resultados de la investigación local.
Los cuatro oficiales son: Yamil Sayyed de la Seguridad General, Mustafa Hamdan de la Brigada de la Guardia Presidencial, Raymond Azar del Servicio de Inteligencia del Ejército y Ali Hayy de las Fuerzas de Seguridad Internas. Ellos han estado detenidos arbitrariamente sin cargos desde 2005 por recomendación del antiguo investigador de la ONU, Detlev Mehlis, en base a testimonios fabricados, de falsos testigos.
Saqr dio a conocer su decisión en el momento en el que aprobó la transferencia de documentos libaneses, vinculados a la investigación sobre el asesinato de Hariri, al Tribunal, creado para juzgar a los sospechosos del caso, y los de otras relevantes figuras libanesas.
“El sistema judicial de Líbano ha decidido apartarse del caso y detener su investigación,” dijo Saqr en su auto. Él añadió que le correspondía al TEL decidir si los cuatro generales, que no han sido formalmente acusados, permanecerán o no en prisión.
El abogado de Sayyed, Akram Azuri, dio la bienvenida a la decisión del miércoles, señalando que era un buen augurio para su cliente. “Esto significa que los generales no continúan siendo acusados ni pueden ser considerados bajo arresto,” señaló. “Ahora están simplemente detenidos y el auto del juez ha puesto fin al caso entre nosotros y la Justicia libanesa.” Él añadió que esperaba que el TEL emitiera un auto ordenando la liberación de sus clientes y de los otros generales en los próximos días.
El tribunal de la ONU hizo el mes pasado un llamamiento a Líbano para que entregara los documentos relativos al caso Hariri y los resultados de la investigación local.