El proyecto de modificación del Código Civil fue aprobado por el gobierno conservador español el pasado viernes, pero todavía no hay una fecha para su aprobación en el parlamento, indicó este lunes una portavoz del ministerio de Justicia español.
"Todavía no sabemos cuando se votará, apenas fue aprobado por el consejo de ministros el viernes, todavía falta tiempo", dijo esta portavoz a la AFP.
Actualmente, los judíos sefardíes, descendientes de los judíos que fueron expulsados de España en 1492 por orden de los Reyes Católicos, tienen que renunciar a su nacionalidad para adoptar la española.
Una vez que se apruebe la reforma podrán conservar su nacionalidad de origen, como ocurre ahora con los nacionales de países iberoamericanos que solicitan la naturalización española.
El gobernante Partido Popular del jefe del gobierno Mariano Rajoy cuenta con mayoría absoluta en el parlamento por lo que la modificación del Código Civil tiene prácticamente asegurada su aprobación.
"El anteproyecto destaca los especiales vínculos de la comunidad sefardí con España desde su expulsión en 1492 y que han quedado simbolizados en las llaves que muchos de ellos conservan de sus hogares en Sefarad (España en lengua hebrea)", afirmó el gobierno español en un comunicado.
Las comunidades judías internacionales alabaron la decisión del ejecutivo español.
"Esto es un reconocimiento histórico de lo que ocurrió hace más de 500 años cuando los judíos españoles tuvieron que elegir entre la expulsión o arriesgarse a morir si no se convertían al catolicismo", afirmó Malcolm Hoenlein, presidente de la conferencia de líderes de unas 50 organizaciones judías internacionales.
Los historiadores creen que unos 300.000 judíos abandonaron España cuando los reyes Isabel y Fernando ordenaron a los judíos convertirse al catolicismo o dejar el país, y más tarde,expulsaron a los musulmanes, tras haberse convertido. Los descendientes de los musulmanes no han obtenido este derecho.