Por cuarta noche consecutiva, los yihadistas fracasaron a la hora de tomar el control de un barrio del norte de Kobane cercano a la frontera con Turquía, indicó el domingo el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
El EI se centra en esa zona con el fin de "asediar" a los combatientes de las Unidades de Protección del Pueblo (milicias kurdas) "dentro de la ciudad, cortarles la carretera de aprovisionamiento e impedirles evacuar a los heridos hacia Turquía", según la ONG.
Los combates continuaron además durante la noche en dos sectores del noreste de la ciudad, así como en el frente sur, donde murieron siete yihadistas, según el OSDH, que se apoya en una vasta red de fuentes sobre el terreno.
Más de 800 personas -481 yihadistas, 302 miembros de las YPG y de las fuerzas de seguridad kurdas, 11 kurdos que participaron en la lucha y 21 civiles kurdos-, murieron desde el inicio de la ofensiva del EI contra Kobane el 16 de septiembre, según la misma organización.
Los kurdos esperan en los próximos días la ayuda de los peshmergas, los combatientes del Kurdistán iraquí que Turquía autorizó a transitar por su territorio para llegar a Kobane.
En otros lugares de Siria, la guerra civil continúa entre el ejército del régimen de Bashar al Asad, los rebeldes y los yihadistas. Al menos 25 civiles, incluidos 11 niños, perecieron el sábado por la noche en ataques aéreos del ejército en dos sectores rebeldes de la provincia central de Homs, según el OSDH.
- Tensiones en Líbano -
El conflicto sirio reavivó por otro lado las tensiones en el norte de Líbano, en particular en la gran ciudad de Trípoli, donde el ejército echó el sábado del centro histórico a hombres armados sunitas sospechosos de apoyar a Al Nosra, la rama siria de Al Qaida.
Este último amenazó el domingo con ejecutar a 27 soldados y policías libaneses que retienen desde agosto como rehenes si el ejército no pone fin a su ofensiva.
Los yihadistas reclaman en particular la retirada del movimiento chiita libanés Hezbolá de Siria, donde combate junto a las fuerzas de Asad.
- Abadi consulta los países vecinos -
En Irak, la coalición dirigida por Estados Unidos reforzó la frecuencia de sus bombardeos en estos últimos días, llevando a cabo al menos 22 bombardeos entre viernes y sábado, la mitad contra posiciones del EI cerca de la represa de Mosul (norte), la mayor del país.
En total, la coalición efectuó más de 600 ataques aéreos contra el EI y lanzó 1.700 bombas en Siria e Irak, según el Mando Militar Estadounidense para Oriente Medio y Asia Central.
Apoyadas por aire, las fuerzas kurdas iraquíes retomaron el control el sábado de la ciudad de Zumar (60 km al noroeste de Mosul), tras semanas de combates.
Pero los yihadistas logran progresar en otras zonas de Irak, sobre todo en el norte, donde asedian nuevamente el Monte Sínjar, donde se hallan atrapadas centenares de familias de yazidíes.
Después de Irán la semana pasada, el primer ministro iraquí, Haidar al Abadi, prosigue el domingo su ofensiva diplomática en Jordania, donde se entrevistará con el rey Abdalá y su homólogo Abdalá Nsur sobre la estrategia para luchar contra el EI, según su gabinete.
Jordania es uno de los numerosos países que participan en la campaña aérea de la coalición internacional.