"De todo corazón, queremos felicitar a los ciudadanos y al gobierno de Holanda por el coraje que ha tenido de tomar esta decisión independiente", declaró al diario de izquierda Qari Yusuf Ahmadij, presentado como el portavoz de los talibanes para el oeste y el sur de Afganistán.
"Esperamos que los demás países que tienen soldados en Afganistán sigan el ejemplo de los holandeses, y retiren sus tropas", añadió el portavoz, en una entrevista telefónica acordada al Volkskrant.
La cuestión del mantenimiento en Afganistán de las tropas más allá del verano provocó la caída del gobierno holandés, el 20 de febrero. A falta de un acuerdo en el seno de la coalición gubernamental, la misión no fue renovada, frustrando las expectativas de la OTAN.
Los laboristas (PvdA), que formaban parte de la coalición gubernamental y se opusieron a la prolongación de la misión militar, "tomaron una de las decisiones más importantes jamás tomadas por el gobierno holandés y sus ciudadanos", según Qari Yusuf Ahmadij.
"Una vez más, llamamos a los países europeos que tienen militares en Afganistán a abandonar el país. No es su guerra, sino una guerra de Estados Unidos, que busca alcanzar sus objetivos imperialistas en el mundo y sobre todo en esta región", añadió el portavoz.
La misión holandesa, que comenzó en agosto de 2006, se compone de unos 1.950 soldados, desplegados principalmente en Uruzgán, una provincia del sur del país, donde los talibanes son muy activos.
"Esperamos que los demás países que tienen soldados en Afganistán sigan el ejemplo de los holandeses, y retiren sus tropas", añadió el portavoz, en una entrevista telefónica acordada al Volkskrant.
La cuestión del mantenimiento en Afganistán de las tropas más allá del verano provocó la caída del gobierno holandés, el 20 de febrero. A falta de un acuerdo en el seno de la coalición gubernamental, la misión no fue renovada, frustrando las expectativas de la OTAN.
Los laboristas (PvdA), que formaban parte de la coalición gubernamental y se opusieron a la prolongación de la misión militar, "tomaron una de las decisiones más importantes jamás tomadas por el gobierno holandés y sus ciudadanos", según Qari Yusuf Ahmadij.
"Una vez más, llamamos a los países europeos que tienen militares en Afganistán a abandonar el país. No es su guerra, sino una guerra de Estados Unidos, que busca alcanzar sus objetivos imperialistas en el mundo y sobre todo en esta región", añadió el portavoz.
La misión holandesa, que comenzó en agosto de 2006, se compone de unos 1.950 soldados, desplegados principalmente en Uruzgán, una provincia del sur del país, donde los talibanes son muy activos.