México "lamenta profundamente el fallecimiento del ciudadano mexicano Anastasio Hernández Rojas (...), expresa su indignación y reitera su más enérgica condena por los hechos que provocaron la muerte", indicó un comunicado de la Secretaría de Relaciones Exteriores mexicana.
El gobierno mexicano, añadió el texto, ha demandado "una exhaustiva investigación de estos hechos a las autoridades estadounidenses y dará seguimiento puntual a su desarrollo".
Hernández Rojas, de 42 años, falleció el lunes de un paro cardiaco luego de que el fin de semana se le diagnosticara muerte cerebral por la golpiza que le propinaron más de una docena de agentes con patadas, palos y también descargas eléctricas, según denuncias de su familia.
La víctima tenía más de 20 años viviendo en el condado de San Diego (California), ciudad vecina de la mexicana Tijuana (noroeste), donde trabajaba como limpiador de piscinas.
El gobierno mexicano, añadió el texto, ha demandado "una exhaustiva investigación de estos hechos a las autoridades estadounidenses y dará seguimiento puntual a su desarrollo".
Hernández Rojas, de 42 años, falleció el lunes de un paro cardiaco luego de que el fin de semana se le diagnosticara muerte cerebral por la golpiza que le propinaron más de una docena de agentes con patadas, palos y también descargas eléctricas, según denuncias de su familia.
La víctima tenía más de 20 años viviendo en el condado de San Diego (California), ciudad vecina de la mexicana Tijuana (noroeste), donde trabajaba como limpiador de piscinas.