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Porteadoras marroquíes en la frontera de Ceuta
La víctima se "desmayó luego de una avalancha a la altura de una de las puertas de ingreso al puesto fronterizo", fue trasladada al hospital de la ciudad vecina de Fnid'q "y falleció", informó la agencia de prensa MAP.
"Las autoridades iniciaron una investigación para determinar las causas del accidente", según MAP.
"Esta mañana hubo una avalancha del lado marroquí", explicó a la AFP un militante local, interrogado por teléfono.
"Una mujer de unos cincuenta años falleció, y otras cuatros resultaron heridas", precisó este activista, Mohamed Benaisa, del Observatorio del Norte de Derechos Humanos (ONDH).
"Hacia el mediodía, comerciantes y porteadoras que cruzan a diario se manifestaron en Fnid'q para denunciar la situación" en el puesto fronterizo, según Benaisa.
A fines de marzo murió una porteadora en las mismas circunstancias.
Las autoridades de Ceuta habían renovado el puesto fronterizo a fines de febrero, principalmente para mejorar las condiciones de trabajo de los porteadores de mercaderías entre este enclave español y Marruecos, en su gran mayoría mujeres.
También habían anunciado el refuerzo de las medidas de control, en especial el peso y las dimensiones de los paquetes cargados por las jornaleras, así como el establecimiento de una cuota máxima de 4.000 porteadores por día.
Pero estas medidas no resolvieron el problema y la apertura del nuevo punto de paso estuvo marcada por numerosas avalanchas, que necesitaron en varias ocasiones la intervención de las fuerzas de seguridad.
Frente a esta situación, el puesto fronterizo cerró durante una semana y reabrió a mediados de marzo.
Las porteadoras, que cargan bultos de hasta 70 kg, hacen varios ingresos al enclave al día. Las asociaciones de defensa de los derechos humanos denuncian una situación "humillante y degradante".
"Las autoridades iniciaron una investigación para determinar las causas del accidente", según MAP.
"Esta mañana hubo una avalancha del lado marroquí", explicó a la AFP un militante local, interrogado por teléfono.
"Una mujer de unos cincuenta años falleció, y otras cuatros resultaron heridas", precisó este activista, Mohamed Benaisa, del Observatorio del Norte de Derechos Humanos (ONDH).
"Hacia el mediodía, comerciantes y porteadoras que cruzan a diario se manifestaron en Fnid'q para denunciar la situación" en el puesto fronterizo, según Benaisa.
A fines de marzo murió una porteadora en las mismas circunstancias.
Las autoridades de Ceuta habían renovado el puesto fronterizo a fines de febrero, principalmente para mejorar las condiciones de trabajo de los porteadores de mercaderías entre este enclave español y Marruecos, en su gran mayoría mujeres.
También habían anunciado el refuerzo de las medidas de control, en especial el peso y las dimensiones de los paquetes cargados por las jornaleras, así como el establecimiento de una cuota máxima de 4.000 porteadores por día.
Pero estas medidas no resolvieron el problema y la apertura del nuevo punto de paso estuvo marcada por numerosas avalanchas, que necesitaron en varias ocasiones la intervención de las fuerzas de seguridad.
Frente a esta situación, el puesto fronterizo cerró durante una semana y reabrió a mediados de marzo.
Las porteadoras, que cargan bultos de hasta 70 kg, hacen varios ingresos al enclave al día. Las asociaciones de defensa de los derechos humanos denuncian una situación "humillante y degradante".
