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Numerosos incidentes se han producido en los últimos días en la frontera entre Israel y Palestina.
El ministro israelí de Defensa, Moshé Yaalon, advirtió que "Hamas es soberano en Gaza, y por lo tanto responsable de los tiros de hoy (martes) en la Franja de Gaza y de los tiros de cohetes de estos dos últimos días hacia Israel".
Yaalon ordenó el cierre "hasta nueva orden" del paso de Kerem Shalom, por donde transitan las mercancías entre Israel y la Franja de Gaza, dijo a la AFP un portavoz del Ministerio de Defensa.
Por su parte, el movimiento islamista Hamas afirmó en un comunicado que "las advertencias y los ataques del ocupante no disuadirán a la resistencia de actuar".
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, llamó a la calma tras los incidentes de los últimos días.
"El secretario general rechaza toda acción contra civiles", dijo su portavoz Martin Nesirky. "Es esencial preservar el acuerdo de alto el fuego de noviembre de 2012 y restablecer la calma", añadió.
Una niña de 3 años, Hala Abu Sabija, murió en un ataque israelí sobre el campo de refugiados de Maghazi, en el centro de la Franja de Gaza, por el que también resultaron heridos su madre y su hermano.
Un portavoz de los servicios de emergencia del territorio palestino, Ashraf al Qudra, estableció el balance en un muerto y seis heridos.
Los ataques israelíes alcanzaron varios objetivos en el este de la ciudad de Gaza, así como dos posiciones del brazo armado de Hamas, en el centro del territorio palestino, indicaron estos testigos.
Israel lanzó los ataques después de que un civil israelí falleciera el martes por un disparo efectuado, según el ejército, por un francotirador palestino, mientras reparaba la valla de separación entre la franja de Gaza e Israel.
"Un francotirador palestino disparó contra un civil israelí durante una operación de mantenimiento de la valla de seguridad al norte de la Franja de Gaza. El civil resultó herido y el ejército del aire israelí lo evacuó hacia un hospital", anunció el ejército israelí en un comunicado.
El ejército israelí subrayó que se trataba del "primer civil israelí muerto alrededor de la Franja de Gaza desde la operación Pilar Defensivo", desarrollada del 14 al 21 noviembre de 2012.
Un portavoz de la policía dijo que la víctima era Saleh Abu Latif, de 22 años y miembro de la minoría árabe beduina de la ciudad de Rahat, en el sur de Israel.
Un miembro de la dirección de la Organización para la Liberación Palestina (OLP), Saeb Erakat, condenó el ataque israelí, con el que consideró que Israel "pretendía iniciar una sangrienta escalada".
"El gobierno israelí mostró hoy a todo el mundo que tienen una agenda para la guerra, no para la paz, y que solo están interesados en cometer crímenes contra nuestros indefensos civiles", dijo Erakat, jefe de negociaciones en las conversaciones de paz con Israel.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, anunció que respondería "con fuerza" a este ataque, según un comunicado de su oficina.
"Se trata de un grave incidente que no dejaremos sin respuesta", declaró Netanyahu. "Nuestra política hasta el momento ha sido de actuar de manera preventiva y de responder con fuerza. Es así como vamos a actuar también esta vez", indicó durante una visita a Sderot, ciudad próxima a la franja de Gaza.
