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"El 17 de agosto (miércoles), bombarderos Su-34 despegaron del aeródromo de Hamedan en territorio iraní para atacar posiciones del grupo terrorista Estado Islámico (EI) en la región de Deir Ezzor", en Siria, indicó el ministerio en un comunicado.
"Los aviones estaban cargados al máximo de su capacidad con bombas de racimo", precisó.
Según el ministerio, estos nuevos ataques permitieron la destrucción de dos puestos de mando y de campos de entrenamiento del EI, así como la "eliminación de más de 150 combatientes, entre los cuales figuraban mercenarios extranjeros".
Rusia atacó el martes posiciones yihadistas en Siria despegando, por primera vez, desde el aeródromo de Hamedan, en el noroeste de Irán, un paso más en la cooperación militar entre los dos principales aliados del gobierno sirio.
Ésta es la primera vez que Rusia utiliza el territorio de un tercer país para bombardear Siria desde el inicio de su campaña militar en este país, hace casi un año.
"En el caso presente, no hubo venta, suministro o transferencia de aviones de guerra hacia Irán", dijo este miércoles el jefe de la diplomacia rusa, Sergei Lavrov, por lo que estimó que no se violó el embargo de venta de armas a Teherán.
"Estos aviones de combate participan en una operación antiterrorista en Siria, a petición de las autoridades legales de Siria y con el consentimiento de Irán", agregó.
"Los aviones estaban cargados al máximo de su capacidad con bombas de racimo", precisó.
Según el ministerio, estos nuevos ataques permitieron la destrucción de dos puestos de mando y de campos de entrenamiento del EI, así como la "eliminación de más de 150 combatientes, entre los cuales figuraban mercenarios extranjeros".
Rusia atacó el martes posiciones yihadistas en Siria despegando, por primera vez, desde el aeródromo de Hamedan, en el noroeste de Irán, un paso más en la cooperación militar entre los dos principales aliados del gobierno sirio.
Ésta es la primera vez que Rusia utiliza el territorio de un tercer país para bombardear Siria desde el inicio de su campaña militar en este país, hace casi un año.
"En el caso presente, no hubo venta, suministro o transferencia de aviones de guerra hacia Irán", dijo este miércoles el jefe de la diplomacia rusa, Sergei Lavrov, por lo que estimó que no se violó el embargo de venta de armas a Teherán.
"Estos aviones de combate participan en una operación antiterrorista en Siria, a petición de las autoridades legales de Siria y con el consentimiento de Irán", agregó.
